“Es hermoso jugar en Estudiantes, espero triunfar acá, la verdad es que lo extrañaba”

Destacó el rol de Lucas Bernardi, a quien lo comparó con Mauricio Pellegrino, el DT que lo supo explotar al máximo años atrás

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Gastón Gil Romero regresó a Estudiantes tras una temporada a préstamo en la Universidad Católica de Ecuador y admitió haber extrañado el club que lo formó profesionalmente.

“La verdad es que se extrañaba estar acá. Desde los 12 años que estoy en Estudiantes. Me pone contento estar de regreso. Es una sensación hermosa estar acá otra vez”, arrancó con su diálogo el volante que supo ser el capitán del equipo y que en los últimos dos años perdió un poco de terreno, al punto de salir a préstamo, primero a Rosario Central y más tarde a Ecuador.

“Ala Universidad Católica fui con la intención de volver a tener continuidad y la verdad es que lo conseguí: jugué 26 partidos en la temporada, en una escenografía distinta como la altura. Fue una linda experiencia que me sirvió para recuperar el ritmo perdido”, continuó para referirse a su experiencia en el fútbol de Ecuador, en un club con el que jugó el torneo local y la Copa Sudamericana.

Gil Romero se sumó al plantel albirrojo en el primer día de la pretemporada pero todavía no sabe a ciencia cierta si se quedará o tendrá que volver a armar sus valijas. “Esperaré que me lo digan, yo tengo todas las ganas de quedarme, pero entiendo los momentos de cada club. Si no se da ahora se dará en otro momento”.

Aún no hablé con Lucas (Bernardi) sobre mi situación, estoy trabajando como uno más y si bien hay muchos jugadores en mi puesto ojalá pueda tener una oportunidad de quedarme, estoy dispuesto a lucharla”, agregó el jugador que es otro volante central para un plantel que ya tiene a Rodrigo Braña, Israel Damonte, Iván Gómez, Fernando Zuqui y recientemente se incorporó Gastón Giménez.

El mayor problema para la continuidad de Gil Romero es su contrato: se vence en junio próximo

“Sé que hay muchos jugadores en mi puesto. Por eso iré viendo en cada entrenamiento en qué lugar estoy. Pase lo que pase lo voy a tomar bien, sé que es para lo mejor de todos aunque mi ilusión sea la de triunfar y lograr cosas con Estudiantes”, aportó sobre su continuidad, algo de lo que nadie habló en forma oficial.

A pesar de la superpoblación del plantel, le juega a su favor la exigente competencia en tan pocos meses que tendrá Estudiantes, con el tramo final de la Superliga, la fase de grupos de la Copa Libertadores y, posiblemente, un partido por la Copa Argentina. “El calendario apretado me sirve para alimentar las chances de quedarme”.

En la práctica de ayer Lucas Bernardi lo probó como central, ante la ausencia de Nicolás Bazzana. ¿Nace un nuevo lugar en la cancha? “Para entrenar no tengo problema, pero para jugar lo veo difícil, nunca lo hice. Soy volante”.

El volante, de 24 años, que antes de su experiencia ecuatoriana tuvo un paso por Rosario Central, explicó que su salida del club en 2016 fue “en busca de continuidad” de juego.

“A veces hay que entender los momentos y aceptar las decisiones de los entrenadores. Cuando me fui lo hizo con la intención de sumar minutos y por suerte lo conseguí, fue una buena experiencia. Cuando te alejás de la familia, del lugar donde estuviste siempre, te hace madurar. Siento que crecí como jugador y como persona”, dijo.

Gil Romero no tuvo una charla directa con el entrenador, pero igual hizo una radiografía suya. Dijo que lo ve como un técnico con mucha docencia, que habla mucho con los jugadores y en ese sentido lo comparó con Gabriel Milito y Mauricio Pellegrino .

“El ecuatoriano no es un fútbol tan táctico como el nuestro. El juego es más dinámico en el mano a mano, ataque contra defensa, con jugadores veloces que lastiman por los costados. Se parte mucho el juego. Aun así me sirvió para mejorar en el juego y en la continuidad, que es lo que me había faltado el año pasado”, detalló en su diálogo con la prensa en el primer piso del edificio del Country.

 

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