Rompió la vidriera con una baldosa y entró a robar en una casa de electricidad

En el comercio aseguraron que el sospechoso había intentado ingresar de la misma forma semanas atrás. Escapó con efectivo

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Se podría decir que en la casa de electricidad “La Mundial” esperaban que, de un momento a otro, se concretara el robo que se había visto truncado con anterioridad por la impericia del autor.

Es que, hace aproximadamente un mes y medio y por la noche, un desconocido rompió uno de los paneles de vidrio que dan a la calle, con el propósito de entrar y concretar el asalto.

Pero como esa parte del escaparate no permite el acceso al interior del local, terminó desistiendo y se fue de la escena sin conseguir más que provocar daños materiales.

No obstante, ayer por la madrugada, en apariencia el mismo sujeto volvió a probar suerte.

Entre las 3.30 y las 4, con una baldosa entera que recogió de la vereda, repitió su modus operandi e hizo estallar uno de los ventanales de la vidriera.

Esta vez eligió bien su blanco.

Logró colarse en el comercio de 19 entre 32 y 33 y, con el camino despejado, corrió hacia el fondo del inmueble donde está ubicado el mostrador.

Sin perder tiempo, abrió la caja registradora y la saqueó por completo.

De acuerdo a lo referido por los encargados, el ladrón no tocó ninguno de los objetos que están en exhibición.

Luego, sacando provecho de la escasa iluminación que hay en el sector, huyó a pie en dirección a calle 32, donde se perdió de vista.

“UN HOMBRE DE CAMISA BLANCA”

Toda la secuencia quedó grabada por las cámaras de seguridad que tiene el negocio.

Según explicó a este medio uno de los empleados que trabaja allí, en las imágenes se puede observar a un hombre “de camisa blanca” como el responsable del hecho.

Lo que llamó la atención de los comerciantes fue que sólo sustrajo dinero.

“Se llevó nada más que plata. Algo de cambio y una venta que había quedado del día anterior, que como fue a última hora no llegamos a resguardar”, confirmó el joven.

“Me asusté bastante cuando esta mañana (por la de ayer) vine al local, porque estaba la ventana rota y la puerta abierta. Pensé que lo tenían al dueño encerrado atrás, pero cuando entré me contó lo que había pasado”, refirió el trabajador.

Asimismo, aseguró que en la zona “no se suelen ver robos de este tipo, por lo menos a nosotros la última vez que nos había pasado una cosa similar fue hace varios años”.

 

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