Aprobó el Concejo la creación de una guardia urbana

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El Concejo Deliberante aprobó ayer la ordenanza que crea la “guardia urbana de prevención” (GUP), un cuerpo de civiles dependiente de la municipalidad, destinado a la vigilancia del espacio público como un apéndice de las fuerzas policiales.

El nuevo cuerpo, integrado por unos 80 agentes, comenzaría a funcionar como tal antes de fin de año, operando, fundamentalmente, en los centros comerciales y plazas más concurridas, donde ya hay personal ejerciendo esa tarea en las denominadas casetas de seguridad.

En rigor, no se espera la incorporación de más personal sino que se le otorgará al existente un protocolo de actuación y uniforme, así como equipos de comunicación para estar conectados tanto con las policías local y provincial como con Defensa Civil y el resto de los organismos municipales.

El objetivo primordial es el de constituirse como una fuerza de prevención y disuasión de delitos y contravenciones, así como de asistencia para cualquier tipo de incidente en la vía pública, realizando un monitoreo del espacio público las 24 horas.

Otra de las características de estos agentes es que no contarán con ningún tipo de arma y sólo estarán facultados para aprehender cuando así sea requerido, dando inmediata intervención a las fuerzas policiales.

ARDUO DEBATE

La iniciativa motivó ayer en el recinto del deliberativo local un arduo debate entre los concejales del oficialismo y la oposición.

Mientras desde Cambiemos subrayaron la necesidad de contar con una mayor presencia del Estado en las calles, que se encuentre “atento a las eventualidades y las situaciones de delito y violencia que pueden suscitarse, en la oposición salieron a cuestionar la “ambigüedad” del texto normativo y argumentaron que la iniciativa es de carácter “represivo”, atentando contra la ley de promoción y protección de los derechos de la niñez y adolescencia.

El proyecto contó con el acompañamiento del bloque del Frente Renovador-GEN, desde donde el concejal Gastón Crespo incorporó al texto modificaciones que fueron bien recibidas por la mayoría. Entre ellas, la creación de una comisión de seguimiento de la GUP con integrantes del Concejo y el Ejecutivo.

Como contrapartida los bloques del FpV-PJ y Unidad Ciudadana y la radical crítica Florencia Rollié, rechazaron la ordenanza por considerar que “no existió suficiente información y análisis” del texto antes de su llegada al recinto.

La kirchnerista Victoria Tolosa Paz advirtió además que la creación de la GUP motivará “presentaciones judiciales por inconstitucionalidad” y reprochó que la norma “le otorga muchas facultades pero no van a poder cumplir ninguna”.

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