A la espera del plan económico, el mercado modera su euforia

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SAN PABLO

El mercado brasileño asimiló ayer el triunfo del ultraderechista Jair Bolsonaro en las elecciones del domingo y espera prolongar en los próximos meses su “luna de miel” con el presidente electo a medida que defina los nombres de su futuro Gobierno y su plan económico.

La bolsa de San Pablo perdió un 2,24% y su índice de referencia bursátil Ibovespa se situó en los 83.796 al cierre de la sesión, mientras que el dólar ganó un 1,39 % frente al real y cerró a 3,706 reales para la venta.

Las agencias de calificación de riesgo crediticio Moody’s y Fitch valoraron positivamente la victoria del ex capitán de la reserva del Ejército al considerar que reducirá la volatilidad en los mercados y animará a los inversores, pero advirtieron que eso no garantiza la aprobación de las reformas estructurales que Brasil necesita.

En las dos jornadas previas al ballotage, el Ibovespa había subido 1,95% y 1,23%, en parte por la expectativa de una victoria electoral de Bolsonaro. En plena resaca post electoral, el indicador cerró con pérdidas a pesar de haber abierto con una suba de casi 3%.

El mercado apostó durante la campaña por Bolsonaro, un nostálgico de la dictadura militar (1964-1985) que enarboló la bandera del liberalismo y “fichó” para su equipo económico a Paulo Guedes, economista ortodoxo de la denominada Escuela de Chicago y quien será su futuro ministro de Hacienda.

Desde el comienzo de la campaña, el pasado 16 de agosto, hasta ayer, la Bolsa brasileña avanzó 8,71% y espera hacerlo más hasta fin de año. La bolsa de San Pablo volverá previsiblemente a subir a medida que se definan los nombres que conformarán el Ejecutivo y se detalle la agenda de reformas y privatizaciones que Bolsonaro prometió cumplir en su primer discurso como presidente electo.

La reforma del sistema de jubilaciones es vista como imprescindible e inaplazable por el mercado financiero para revertir el abultado y crónico déficit público de Brasil.

El déficit nominal de las cuentas públicas brasileñas -sumado el pago de intereses de la deuda- alcanzó los 488.800 millones de reales (unos 132.000 millones de dólares) en el último año hasta septiembre, lo que representa 7,20% del PBI, según informó el Banco Central.

Bolsonaro espera revertir ese desajuste con un programa liberal, basado en privatizaciones de empresas estatales, ajuste fiscal, reformas y una descentralización del Estado a fin de reducir su tamaño, empezando por un corte drástico del número de ministerios. (EFE)

 

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