Clima hostil en la puerta del hotel para no permitir el descanso del equipo boquense

Los pronósticos de quienes imaginaron un clima por demás adverso para la delegación de Boca en Belo Horizonte, se cumplieron sobradamente, y en la noche previa al gran partido frente a Cruzeiro, un grupo de fanáticos seguidores del equipo local alteró las condiciones en el frente del hotel donde se concentraron los Xeneizes con la idea de complicar el descanso.

Claro, pues en las primeras horas de la madrugada se escuchó una verdadera sinfonía de explosiones en la puerta del lujoso hotel Ouro Minas de Belo Horizonte, lo cual se extendió varias horas, con detonaciones que se repitieron una y otra vez, sirviendo de fondo a los gritos de esos incansables hinchas.

Bombas de estruendo fueron moneda corriente en las inmediaciones del hotel ubicado en pleno centro de la ciudad, con un shopping enfrente, y un ambiente inapropiado, tanto para los futbolistas argentinos como para el resto del público que por distintas causas estuvo en el lugar.

Hubo también fuegos artificiales, petardos, explosivos varios, banderas y elementos de percusión para tratar de alterar el descanso del rival de Cruzeiro en cuartos de final de la Copa Libertadores.

De todos modos, en las primeras horas de la mañana, el jefe de seguridad del club Xeneize aseguró que “los jugadores descansaron bien” y “no se vieron perjudicados por las bombas y fuegos artificiales que tiraron los hinchas” de Cruzeiro durante la madrugada.

Atentos a lo que podía suceder, y representa poco menos que una constante en este tipo de circunstancias, los organizadores del traslado boquense eligieron habitaciones situadas en pisos superiores para evitar este tipo de molestias.

Explosiones que existieron y fueron registradas por varios de los periodistas que acompañaron al equipo boquense y se alojaron en el mismo hotel.

Curiosamente, el hotel en cuestión destaca, entre sus comodidades, un “aislamiento acústico” en sus habitaciones, lo que pudo haber jugado a favor de los argentinos.

TAMPOCO FALTARON LOS GOLPES

La situación vivida por Boca en Belo Horizonte incluyó también episodios de violencia, porque también en la noche previa una decena de hinchas de Cruzeiro acorralaron a un grupo de Boca en la puerta de un hotel, a pocos kilómetros del estadio Mineirão, y se cruzaron a golpes.

De acuerdo a fuentes policiales, no se registraron detenidos.

BARRAS AUTORIZADOS A VIAJAR

La Justicia argentina autorizó finalmente a Rafael Di Zeo, Mauro Martín, Carlos Sebastián Maciel y Gustavo Alberto Iglesias, de la barra brava de Boca, a viajar a Belo Horizonte.

La resolución revocó de esta forma un fallo que negaba el permiso de salida a los barras.