De qué forma ayuda una buena relación de pareja a no engordar

Edición Impresa

Durante muchos años los estudios científicos han comprobado los beneficios asociados a tener una buena relación de pareja, desde una mayor longevidad hasta una reducción del riesgo de sufrir ataques al corazón.

Sin embargo, con respecto a mantenerse en el peso adecuado estos beneficios parecían no ser los mismos. De hecho varios trabajos sugieren que estar casado podría hacer que los implicados en la relación ganen peso y lleguen a los 50 con algún grado de obesidad. Aquello que solemos llamar “la curva de la felicidad”.

Pero una nueva investigación del Departamento de Epidemiología de la Escuela de Salud Pública de Harvard ha traído nuevas evidencias de que estar en una relación de pareja consolidada y de calidad es bueno para la salud, y concretamente para mantenerse en la línea.

Los investigadores estudiaron a 2.650 personas que habían tenido una relación larga y estable o un matrimonio y compararon la calidad de esta relación con la ganancia de peso en un periodo de nueve años.

Las parejas que puntuaban más alto en la calidad de sus relaciones eran menos proclives a ganar peso que aquellos cuya relación sentimental no era tan buena. De hecho, los que vivían en una buena relación tenían un 22% menos de riesgo de obesidad y habían ganado al año tres kilos menos que los otros.

Los beneficios en el peso se observaron en parejas que tenían una relación muy buena, estuvieran o no casadas.

OBESIDAD

Las personas obesas son menos propensas a disfrutar del sexo, publica el Dr. Martin Binks de la Universidad de Duke, donde realizó un estudio conductual en más de mil obesos del campus.

La investigación señala que los obesos tienen 25 veces más problemas en la cama que los que tienen las personas consideradas con un peso saludable. Algunas personas inclusive reportaron que evitaban tener relaciones sexuales por completo.

La mitad de las personas que asisten al Centro de Fitness y Dieta de la Universidad en busca de tratamiento contra la obesidad, dicen que regularmente o siempre tienen falta de deseo sexual, comparado con sólo 2% que reportaron las personas no obesas. Cuatro de cada diez obesos dijeron tener problemas físicos durante el sexo, 41% declaró evitar del todo tener relaciones sexuales.

El psicólogo clínico Jorge Torres-Saenz indica que los problemas como perder el deseo sexual se deben en buena parte a que existe una imagen que promociona una cultura en la que debemos estar delgados, sobre todo en las mujeres. “La gente absorbe estos mensajes y cuando aumenta de peso empiezan a estar mal con su imagen corporal y por lo tanto a tener dudas sobre que tan atractivas son. También existen factores físicos como tener alto el colesterol o la resistencia a la insulina (los comienzos de la diabetes) que afectan el deseo sexual.”

Aunque es alto el porcentaje de personas que reportan problemas en la cama según el estudio, otras investigaciones sugieren que las personas con sobrepeso no mencionan tener dichos problemas, mencionó Torres-Saenz.

 

Las noticias locales nunca fueron tan importantes
SUSCRIBITE