Para el Gobierno su futuro político depende de salir de la recesión económica entre febrero y marzo
Edición Impresa | 2 de Diciembre de 2018 | 08:50
Por OSVALDO GRANADOS
Miguel Ángel Pichetto por televisión aclaraba: “La policía de París, pega en serio”.
La final del mundo, River – Boca, termino en un bochorno.
La clase media está cansada que los piqueteros, todos los días corten las principales avenidas. Asesinato e inseguridad ocupan las pantallas de televisión.
Miles en redes sociales piden un Bolsonaro argentino.
Eduardo Duhalde en una reunión, señalaba que la gente reclama orden porque se cansó de la anarquía.
¿Se viene una ola populista de derecha?
¿La democracia liberal se debilita?
Se empieza a ver a Macri como demasiado contemplativo y débil para enfrentar a la calle y los problemas.
Los que no creen en la democracia, un 48 % según las encuestas, apuntan a que la esta acumula burócratas, gastos, corruptos y miles de impuestos.
Cuando las instituciones no cumplen como en Brasil, los electores escépticos buscan la salida fácil.
¿Están buscando un líder fuerte?
Cristina piensa que le tocó el turno otra vez. Cuando le señalan que el peronismo pide que de un paso al costado, repite lo mismo: “Si me traen a uno que mida , no soy candidata”. “Un tercio es mío“. “Mi único adversario es Macri”.
Se reunió dos veces con el periodista Alejandro Fantino para salir por televisión.
Está convencida que la economía es su gran aliada.
La batalla para el Gobierno es que puedan salir de la recesión entre febrero o marzo.
En esos meses se juega el futuro de Macri.
En el Banco Central se reunieron el lunes con empresarios y directivos de Fondos Comunes de Inversión.
Salieron con la idea –fue más que eso- una promesa que en febrero las tasas estarán en el 40 % anual, inflación del 2 %. Habrá un plan de rescate para las industrias más castigadas, como textil, calzado y marroquinería. No se habló de ningún plan de desarrollo.
Está muy claro que en tiempos de recesión, ese tema es utópico. En la UIA, ven este fenómeno como un pare – siga, pare – siga.
Viene plata, nos financian. Crece el consumo, creemos que ya esta todo solucionado. Llega la otra corriente, devaluación y recesión. Esto fue la constante en los últimos 40 años.
El peronismo federal o alternativo, consiguió 7 gobernadores
Manzur le dijo a Gioja: “La unidad es dentro del peronismo”. “Unidad Ciudadana es otro partido“. “No vamos a ir a internas”. Agregó que están cansados que Alberto Fernández les diga lo que tienen que hacer. El final fue contundente. “Si ella se baja, empezamos a hablar”.
¿Por qué se debe bajar?, pregunta Gioja. “Por que pierde en la segunda vuelta” , fue la respuesta.
Los kirchneristas quieren un frente patriótico con la izquierda, el Partido Comunista, los movimientos sociales y parte de la Iglesia.
El discurso es de un populismo de izquierda.
Pasemos a la economía. Llegan las reuniones de fin de año con empresarios.
Están molestos con todos: oficialismo, oposición, con los sindicalistas .
Dicen: “nadie esta a la altura”
“Hoy, muchas compañías pierden plata, los impuestos te ahogan, no hay crédito, no se hicieron las reformas estructurales, los piquetes son un infierno, la presión sindical no te deja hacer reformas”, agregan.
Son más críticos los industriales, bastante menos los banqueros y hombres de campo.
¿Regresa Cristina?. La pregunta obvia.
“No, nunca”. “Sería un salto al vacío”.
Este fin de año los encuentra a la defensiva.
Nada está seguro. Además se acerca el año de elecciones. Cayó el poder adquisitivo, menos consumo y ventas. Las empresas producen lo mínimo. Liquidan stocks, porque el costo financiero de mantenerlo es alto.
Todos preguntan lo mismo: ¿Cuándo la economía pega la vuelta?.
Los consultores dudan. Hacen malabares en la pizarra. Hablan de varios escenarios posibles para no equivocarse. Terminan diciendo: “Es complicado vaticinarlo”.
Están los optimistas y los pesimistas. El problema es que estos últimos, siempre acertaron.
Las noticias locales nunca fueron tan importantes
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