El intendente Arroyo abandonó un acto de Vidal enojado por el lugar que le dieron

Los organizadores lo pusieron detrás de una valla, lejos del palco. “No es digno de un intendente”, dijo, y se retiró

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El acto de inauguración de una playa pública de servicios en Mar del Plata se convirtió ayer en escenario de un nuevo cortocircuito entre el gobierno de María Eugenia Vidal y el intenendete oficialista de esa ciudad, Carlos Arroyo, que ya no oculta su mala relación con la mandataria provincial.

El jefe comunal decidió abandonar entre airadas quejas el acto que la Gobernadora encabezó ayer en la playa, en un gesto que abrió interrogantes sobre la permanenciade Arroyo en el espacio de Cambiemos.

El incidente se produjo en el marco del tradicional raid de actividades de la Gobernadora en la Costa en la previa de la temporada de verano. Vidal estuvo el jueves en el Polideportiva Islas Malvinas en el acto de lanzamiento del Operativo Sol, donde se mostró con el ministro de Seguridad Cristian Ritondo.

Ayer, fue el turno del lanzamiento del programa “Verano en la Provincia”, que contempla playas públicas con servicios en Mar del Plata y otros puntos de la Costa Atlántica.

Para el acto, que se hizo en los corredores del balneario público, los organizadores decidieron quela gobernadora Vidal se muestre acompañada por un reducido grupo de colabores. Estuvieron, a su lado, el Secretario General de la Gobernación, Fabián Perechodnik, el el ministro de Cultura, Alejandro Gomez, el presidente del Banco Provincia, Juan Curutchet y la subsecretaria de Turismo, Martina Pikielny. Además, como viene haciendo en sus úlimas incursiones marplatenses, en el “palco” estuvo el diputado Nacional, Guillermo Montenegro, quien viene siendo promovido como el candidato a intenden te en 2019.

Al intedente Arroyo, sus colaboradores y los legisladores y concejales fueron ubicados detrás de un vallado, en una especie de corralito, lejos de la Gobernadora.

Bajo el sol del mediodía, Arroyo se mostró molesto a poco de llegar a su ubicacíón. “Este no es un lugar digno para un intendente, yo me voy, ustedes hagan lo que quieran”, le dijo a un grupo de periodistas que se encontraba cubriendo el acto.

Arroyo se retiró raudamente en un vehículo, y en la playa quedó parte de su gabinete.

Lo mismo ocurrió con referentes del radicalismo local, que también se retiraron del acto cuando fueron notificados de que únicamente en el palco estarían la gobernadora Montenegro. Entre los radicales estaban Maximiliano Abad, jefe del bloque de Cambiemos en la Cámara de Diputados de la Provincia, quien aclaró que se retiró porque debía llegar a un acto en Lobería, las concejales locales Vilma Baragiola, Cristina Coria y el diputado de la Coalición Cívica, Guillermo Castello.

Fuera de micrófono, fueron varios los oficialistas que se quejaron por esa decisión. “No hubo un error de ceremonial. Hubo una decisión política”, dijeron.

En ese marco, se abrieron especulaciones sobre si Arroyo se mantendrá en Cambiemos o buscará la reelección con una fuerza vecinalista.

 

 

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