Vidal Borda: complicaron a un acusado

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Tres testigos declararon ayer contra uno de los acusados por el caso de Mery Vidal Borda (35), la mujer embarazada que fue baleada, en 2013, en un comercio de Berisso y perdió a la beba de 6 meses que gestaba.

Familiares de Nahuel Víctor Jesús Caliva (25) , el imputado de ser el autor del disparo, cargaron contra el otro acusado, Fabían Monzón (31).

La madre de Caliva acusó al mayor de los procesados de ser un manipulador, que supuestamente vendía droga y llevaba a robar a los más chicos.

También declaró que su hijo se drogaba desde los 8 años y que sufría de retraso madurativo.

Luego una hermana del imputado Caliva le contó que vio en la noche del hecho a Monzón en su casa, que sacó un arma, con tambor, y que había llegado con una moto 110 , azul y negra, con asiento blanco.

La semana pasada, un vecino de la verdulería de calle 21 entre 167 y 168, donde la mujer fue atacada, dijo que vio entrar a un chico, que sacó un arma, comenzó a gritar y luego disparó contra la mujer.

También declaró que en la puerta había un cómplice en una moto.

Luego un testigo de identidad reservada aseguró que Caliva le mandó un mensaje pidiéndole ayuda porque se “había mandado una cagada”.

El testigo reveló que se asustó, al ver que por TV daban el caso de la mujer embarazada baleada en Berisso.“El me dijo que había ido a asaltar con Fabián (supuestamente el otro acusado, Monzón) y se le escapó el tiro”, aseguró.

Además recordó que Caliva fumaba Philip Morris, dato que coincide con una prueba clave de la causa: en la escena del crimen se halló una colilla de esa marca con ADN del acusado.

El Tribunal IV -integrado por los jueces Emir Caputo Tártara, Claudia Marengo y Hernán Decastelli- seguirá con el juicio mañana, desde las 11, en el fuero penal de 8 y 56.

 

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