Pablo Moyano confirmó la marcha del 22 de febrero, ante rumores de suspensión

Durante la tarde de ayer, hubo una versión muy firme -reflejada incluso en los portales on line de los principales diarios porteños- de que el acto en contra del Gobierno, que el gremio de Camioneros, bajo la batuta de Pablo y Hugo Moyano, había organizado para el 22 de febrero próximo a Plaza de Mayo, había sido postergado con fecha a definir por coincidir con el sexto aniversario de la Tragedia de Once.

La información había sido difundida por familiares de las víctimas de Once y confirmada por fuentes de la CGT.

Por la noche, Pablo Moyano, el titular de camioneros, desmintió la versión en un comunicado: “La movilización del próximo 22 de febrero sigue en pie y más firme que nunca, pese algunos transcendidos periodísticos mal intencionados. Siempre vamos a estar del lado de los trabajadores, marchamos a proteger todas y cada una de las fuentes de trabajo, ese es nuestro compromiso”.

Y dijo que los organizadores de la protesta se reunirán la semana próxima para ultimar detalles del acto.

En tanto el triunviro Héctor Daer dijo ayer que “no se puede aceptar que alguien tenga el capricho de adueñarse de la voluntad colectiva de la CGT”, en clara alusión al sector que encabezan Hugo y Pablo Moyano.

Daer representa a los gremios de servicios conocidos como “los gordos”, que dentro de la CGT no se plegaron a la marcha convocada para el 22 de febrero.

LA VERSIÓN DE LA POSTERGACIÓN

La versión de la suspensión del acto indicó que Facundo Moyano se comunicó con María Luján Rey , madre de Lucas, uno de los muertos del 22 de febrero de 2012 avisarle que la elección de la fecha no había sido “intencional” y que los gremios que la convocaron iban a cambiar la fecha. Ese día se cumplen seis años de la tragedia de Once, por lo que los familiares de las víctimas reclamaron a los organizadores de la protesta que se movilicen otro día

DAER, ENOJADO CON LA MARCHA

El triunviro de la CGT Héctor Daer, líder del gremio de la Sanidad y representante del sector sindical conocido como los “gordos”, criticó la marcha del 22 de febrero convocada por los camioneros de Hugo Moyano y subrayó que es inaceptable “el capricho de adueñarse de la voluntad colectiva de la CGT”, y que la central no se va a poner “al servicio de ningún gremio ni dirigente”.

“No se puede aceptar que alguien tenga el capricho de adueñarse de la voluntad colectiva de la CGT”, remarcó Daer, en declaraciones periodísticas.

“Nuestra posición es clara: no vamos a poner a la CGT al servicio de ningún gremio ni dirigente”, dijo.