Puso en marcha dos semanas de trabajo pensando en la seguidilla de partidos

Luego de descansar en la jornada del lunes, el plantel profesional de Estudiantes volvió a los entrenamientos ayer por la tarde en el Country Club de City Bell. Debido a la fecha FIFA el próximo fin de semana no habrá fútbol por el torneo de la Superliga y, por ende, Lucas Bernardi tendrá dos semanas para trabajar junto a sus dirigidos antes de encarar una seguidilla clave pensando en las aspiraciones que tienen tanto en la Copa Libertadores como en el torneo doméstico.

En la práctica de ayer, los jugadores realizaron al comienzo algunas tareas regenerativas junto a los preparadores físicos y, luego, se dividieron en cuatro grupos para realizar tareas de apoyo y definición en espacios reducidos. El entrenador albirrojo, sin tiempo que perder, ya empezó a ajustar distintos aspectos del juego con la mira puesta en lo que viene.

Bernardi buscará sacarle el máximo jugo posible a estas dos semanas de entrenamiento, ya que el próximo encuentro será recién el sábado 31 de marzo frente a Vélez en el José Amalfitani desde las 13:15 horas. Tal como había indicado en la conferencia previa al partido ante Godoy Cruz, para el rosarino este receso le viene bien al equipo: “Para nosotros es positivo ya que venimos cargados, luego el mes y medio que se viene lo tendremos con mucha competencia y mucha presión”.

Pensando en el encuentro ante el Fortín, una de las mayores incógnitas en el armado del equipo girará entorno a Sebastián Dubarbier, quien el fin de semana ante el Tomba sumó minutos en cancha luego de la lesión que sufrió en la previa al partido ante Newell’s a comienzos de año.

SIETE PARTIDOS EN 24 DÍAS

Luego del parate por la fecha FIFA, Estudiantes encarará una seguidilla de siete partidos en apenas tres semanas. La misma comenzará con el ya mencionado duelo ante el Fortín, y continuará unos días más tarde cuando reciba al Santos de Brasil en el estadio Centenario de Quilmes (no podrá usar el estadio Ciudad de La Plata por el recital de Depeche Mode) por la cuarta fecha del Grupo 6 de la Libertadores. Ambos encuentros serán importantes para el Pincha, ya que necesitará ganar en Liniers para seguir soñando con la Copa 2019 y ante el conjunto brasileño para encaminar su clasificación a los octavos de final de la actual edición.

Apenas cuatro días más tarde de haber jugado ante el “Peixe” recibirá también en el estadio cervecero a Chacarita, uno de los rivales más flojos de la actual Superliga, y luego adelantará su partido ante River en el estadio Monumental para el jueves 12 de abril (aún resta la confirmación oficial). La seguidilla continuará unos días más tarde, más precisamente el 15, en Paraná contra Patronato.

El 20 de abril recibirá a Belgrano, ya nuevamente en el estadio Ciudad de La Plata, por la fecha 24 de la Superliga y, cuatro días después, cerrará la seguidilla viajando a San Pablo para enfrentarse al Santos en el mítico estadio Pacaembú, recinto estatal que fue sede del Mundial de Brasil 1950.

Luego sí, y debido a que no deberá jugar frente al Millonario el fin de semana del 29 de abril, tendrá una semana para preparar su visita Cuzco el Día del Trabajador (1º de mayo) para jugar ante Real Garcilaso, en marco de la anteúltima fecha del Grupo 6 de la Libertadores.

Es por esta seguidilla de encuentros que las próximas dos semanas de entrenamiento sin partidos serán fundamentales pensando en el fortalecimiento del equipo tras la derrota ante Godoy Cruz del pasado domingo.

AUSENTE POR PATERNIDAD: NACIÓ EL HIJO DE IVÁN GÓMEZ

En la práctica de ayer el único ausente en del plantel de Estudianets fue Iván Gómez, quien fue padre por primera vez en horas de la tarde y tuvo licencia por dicho motivo. El volante categoría 1997, que viene de ser titular ante Godoy Cruz, venía mostrando en sus redes la felicidad por el bebé que estaba en camino.