En un mes ya suman tres robos en una casa de fotocopias

Ni la presencia de la cámara para registrar todos los movimientos y la cara, ni el estruendo de la alarma al vulnerar la puerta frenaron a un ladrón que, en las últimas horas, sumó un negocio de fotocopias situado en 55 entre 10 y 11 a la extensa lista de afectados por la ola de delitos en el centro de la Ciudad.

El robo se perpetró con la modalidad conocida como “escruche” pese a que el comercio está protegido con una cámara y una alarma. Así, quedó registrado todo el episodio y puede verse a un ladrón ingresar, tomar dinero de la caja, salir, volver a entrar para recoger un fierro y salir. Prácticamente la mitad de la secuencia, que dura unos dos minutos, se desarrolla con la bocina de la alarma sonando a todo volumen.

Pese a que las autoridades policiales anunciaron refuerzos en el patrullaje de la zona céntrica, los comerciantes vienen denunciado escruches y asaltos a diario. Se suma el vandalismo contra paredes y vidrieras en horarios nocturnos.

“Es el tercer robo que sufrimos en menos de un mes. Es increíble ser parte de la estadística de este modo”, lamentó una empleada del comercio.

Entró con una barreta

La mujer explicó que el ladrón “entró rompiendo la puerta con una barreta de hierro. Luego, tomó la plata de la caja, un bolso con herramientas y salió, pero volvió porque, al parecer, había dejado la barreta, así que entró de nuevo a buscarla”, añadió la empleada.

El delincuente también incrementó el botín con herramientas que se emplean en la reparación de las máquinas para hacer fotocopias. Además, en el bolso había un destornillador eléctrico. La mujer apuntó que “la mayor parte de lo que se llevó no le va a servir de mucho porque tiene uso específico en esas máquinas. Ni siquiera tiene valor de venta”, dijo.