Alertan que crecen el abuso y los maltratos contra adultos mayores

A medida que crece la expectativa de vida en nuestra sociedad y se vive más años, son cada vez más las personas que dependen del cuidado de otras para su desempeño cotidiano. Y en ese contexto ha comenzado a observarse cada vez con mayor frecuencia un fenómeno del que pocos tienen registro: el de los maltratos que sufren los adultos mayores tanto por parte de cuidadores profesionales como de su propio entorno familiar.

Como una forma de hacer visible esa problemática, sobre la que casi no existen estudios en nuestro país, se conmemora hoy en todo el mundo el Día de la Toma de Conciencia contra el Abuso y el Maltrato al Adulto Mayor.

“Así como fue necesario tomar conciencia de la violencia contra la mujer, la sociedad tiene que enterarse ahora que existe también una violencia cada vez más extendida contra los mayores”, explica Silvia Gascón, integrante de Red Mayor La Plata, una institución que impulsa políticas para el sector de la tercera edad.

Aunque no se dispone de datos que permitan dimensionar el fenómeno, el creciente número de casos que advierten desde la Red Mayor da cuenta de su diversidad. “Se dan maltratos de todo tipo: en muchos casos son físicos, con zamarreos y pellizcones, pero también los hay psicológicos, con humillaciones e insultos, e institucionales, los que suelen manifestarse por faltas de consideración a su vulnerabilidad especial”, comenta Gascón.

“Entre los derechos de los adultos mayores más vulnerados en la actualidad se encuentra en primer lugar el derecho de la capacidad. La capacidad es la facultad que tenemos todos a partir de los 18 años de manera plena de ser titulares de derechos y obligaciones y ejercerlos. Y si bien la vejez no constituye de por sí un elemento que pueda disminuir la capacidad, en la práctica está instalada esa asociación. De hecho, hoy existen numerosos juicios por inhabilitación”, explican desde la Red Mayor.

“Con buenas o malas intenciones, a menudo los propios familiares comienzan a tomar decisiones invadiendo el espacio de libertad del adulto mayor. Y esto es algo que se vincula con la violencia, porque cuando la persona mayor se resiste a que otro decida por él comienza una escalada de agresión respecto a la cual el mayor termina cediendo sus derechos”, advierten.