Protesta, allanamiento y otro alumno bajo sospecha por las amenazas de bomba sin fin

Lejos de apaciguarse, la ola de amenazas de bomba a instituciones educativas de la Región sumó ayer otra decena de casos, una enardecida protesta de padres en Berisso y un allanamiento en la zona de Tribunales. El procedimiento policial fue, puntualmente, en un edificio de la cuadra de avenida 13 entre 46 y 47, donde agentes de distintas divisiones desplegaron un operativo de proporciones e identificaron a un alumno como el presunto autor de llamados intimidatorios al Normal 1, uno de los establecimientos más castigados por la seguidilla de intimidaciones.

Portavoces judiciales y policiales adelantaron que, en el marco de diferentes causas por intimidación pública, “ya hay varios sospechosos en la mira”, los que habrían sido localizados y “prontamente serán puestos a disposición de la Justicia”, resaltaron.

El allanamiento -que se suma a otros realizados en Berisso y Los Hornos días atrás- fue llevado a cabo por efectivos de la comisaría Primera, de la Jefatura Departamental La Plata y de la Dirección de Explosivos, en el marco de la investigación por las falsas alertas recibidas en la escuela situada en 51 entre 14 y 15.

Los efectivos llegaron hasta allí con una orden de la UFI N° 15, a cargo de la fiscal Cecilia Corfield, y el Juzgado Garantías Nº 6, de Fernando Mateos. Según fuentes oficiales, tras la investigación del Gabinete de Delitos Informáticos se determinó que allí vive el dueño de un teléfono móvil desde el cual se hicieron llamadas intimidatorias, un Samsung modelo A-5, que fue incautado.

Los llamados habrían sido realizados por un adolescente de 14 años, que es alumno del tercer año de la secundaria ubicada a metros de la plaza Moreno. Aparentemente, el llamado se hizo el día en que debía rendir un examen.

Fue clave para la investigación el aporte de la empresa prestataria del servicio, a través de la cual los investigadores obtuvieron el abonado telefónico y la titularidad.

Ahora la Provincia podría accionar civilmente contra los padres del menor involucrado.

imparables

De un tiempo a esta parte las amenazas de bomba se han convertido en una fuerte problemática de la Región: generan interrupciones y cancelaciones de clases, además de cuantiosos gastos por los despliegues que deben montarse para chequear su veracidad.

Ayer el Colegio Nuestra Señora del Perpetuo Socorro de Berisso, situado en calle 167 y 20, recibió también amenazas de bomba, lo que provocó que los padres, indignados, se manifestaran por la tarde frente al playón municipal y exigieran una solución a las autoridades.

Por la mañana la sucesión de intimidaciones había generado complicaciones en Tolosa, donde dos colegios, uno público y otro privado, recibieron amenazas y debieron ser evacuados.

La acción intimidatoria estuvo direccionada, por un lado, a la Escuela Media Nº 5, situada en 531 entre 115 y 115 bis, donde los alumnos fueron evacuados del edificio y tuvieron que esperar en las inmediaciones hasta que la brigada de explosivos finalizó las inspecciones de rigor.

No obstante, el alerta también tuvo repercusión en Colegio Nuestra Señora del Carmen, que se encuentra en 115 entre 530 y 531, cuyas autoridades escolares señalaron a EL DIA que si bien las advertencias fueron a otro colegio cercano tuvieron que proceder a evacuar las aulas “porque así lo indica el protocolo”.

El Normal 1 -en dos ocasiones- y el Albert Thomas, fueron otros de los establecimientos afectados. “La situación es vergonzosa porque ya no hay clases normales”, se quejaron desde esa comunidad educativa.