Cansados de robos y daños en diagonal 74 ya piensan en una guardia privada

Ante lo que se considera como una imparable ola de robos y ataques nocturnos, en el área comercial que tiene como zona núcleo la diagonal 74 entre las plazas Italia y Moreno, una cámara empresarial gastronómica se cansó de esperar una respuesta oficial y ya analiza contratar un servicio de guardias privados que vele por sus locales cuando se apaga la actividad nocturna.

La iniciativa contempla la creación de una especie de consorcio que incluye a una veintena de propietarios de bares y restoranes nucleados en PULPA, denominación con la que se conoce a la Cámara de Empresarios Gastronómicos de La Plata. El costo, que demandaría una inversión estimada en el orden de los 50 mil pesos, se repartiría entre todos los que accedan al servicio consistente en un “rondín” nocturno de guardias por la zona caliente de delitos, según el diagnóstico de los comerciantes.

“Hemos tenido una reunión ampliada de la Cámara, con los asociados. Entre las problemáticas que se analizaron está la de la seguridad en el área de diagonal 74 por la incidencia de los robos y el vandalismo”, contó el vice presidente de la entidad, Alejandro Aguirre y añadió que, si bien aún se estudian aspectos legales referidos al servicio y su margen de acción, “la resolución fue contratar un rondín que funcione durante la madrugada”.

La banda horaria que preocupa en los negocios va desde el cierre de la trasnoche hasta la mañana siguiente, cuando se advierte la baja de movimiento y de vigilancia, según entienden en PULPA . “Lo primero que hicimos fue presentar una nota en la comisaría primera, a fines de marzo”, indicó Aguirre. También se establecieron contactos desde la Cámara con el área de Seguridad del Municipio.

Los empresarios no están conformes con el resultado de esas gestiones. “Esperamos la respuesta con los hechos. Nos dijeron que iban a evaluar el tema, que trabajaban en el refuerzo de patrullaje”. Mientras tanto, Aguirre apuntó que “se ven más motos de la Policía Local”. Los negocios tienen alarma con monitoreo. Cuando suena, se presentan la empresa y la Policía. Así y todo, el dirigente adelantó que el sector se plantea avanzar con patrullaje privado que prevenga, al estilo country. Al plan, con los números y servicios sobre la mesa, se lo pondrá en consideración en el próximo encuentro de asociados a PULPA, tras las vacaciones de invierno. Comprende a la diagonal, entre 50 y 46, más algunas adyacencias con cervecerías, bares y restoranes.

Según se analiza en la entidad, hay consenso para avanzar. “Los únicos que no han dado su acuerdo todavía son aquellos comerciantes a los que no les dan los números. Hay que pensar en que la actividad se ha afectado y los márgenes son muy finos”, indicó un comerciante.

La presión está entre los costos y los delitos. Este diario consultó en la comisaría primera sobre el planteo. Allí, prefirieron no hacer comentarios oficialmente. Aunque, una fuente habitual deslizó que “la estadística dice que los delitos en la zona bajaron.

Sin embargo, el comercio tiene un mapa poblado de delitos. “En los últimos dos meses, todos los locales (de gastronomía) han tenido al menos un episodio de vandalismo o robo”, indicó Aguirre.

Son unos 20 emprendimientos integrados en PULPA las víctimas de esos ataques. Según los dueños, sufren roturas por ingresos con fines de robo. “Pibes y de madrugada”, según definió el cuadro Aguirre. En casos, llevan registradas 2 y 3 visitas.

Esos delitos dejan un pasivo que puede estar fácilmente en los 30 mil pesos, entre cambio de cristales, de cerraduras y arreglos de aberturas. “Los seguros cubren cristales y solo una vez al año”, aclaró el vicepresidente de PULPA.