Fuerte tensión migratoria entre Brasilia y Caracas
Edición Impresa | 20 de Agosto de 2018 | 02:23

BRASILIA
El gobierno de Brasil anunció ayer nuevas medidas de seguridad y asistencia social para atender a los inmigrantes venezolanos, tras los ataques registrados en la localidad fronteriza de Pacaraima contra campamentos de ciudadanos de la nación caribeña.
El Ejecutivo informó en un comunicado que establecerá un nuevo centro de albergue en el empobrecido estado de Roraima (norte del país), puerta de entrada del éxodo venezolano, y que mandará un batallón de 120 miembros de la Fuerza Nacional para reforzar la seguridad.
También decidió enviar 36 voluntarios del área de salud para una mejor atención a los inmigrantes venezolanos, que llegan a Brasil para huir de la crisis económica, política y social que atraviesa su país.
Las medidas fueron acordadas en una reunión que mantuvo el presidente de Brasil, Michel Temer, con varios de sus ministros, entre ellos los de Defensa, general Joaquim Silva e Luna; y Seguridad, Raúl Jungmann, con motivo de los incidentes registrados el sábado en Pacaraima, luego de que robaran, apuñalaran y golpearan a un comerciante de esta localidad de unos 12.000 habitantes.
Los vecinos culparon de este ataque a cuatro inmigrantes venezolanos. A modo de protesta, los vecinos expulsaron a los numerosos inmigrantes venezolanos de las precarias tiendas de campaña donde sobreviven en la zona y quemaron sus objetos personales.
DRAMA HUMANITARIO
El gobierno del estado de Roraima estima que más de 50.000 refugiados venezolanos cruzaron la frontera y duermen en albergues o a la intemperie, en carpas, plazas y calles. Esto supone casi el 10% de la población del estado, 520.000 habitantes.
Para huir de la violencia, cientos de inmigrantes cruzaron la frontera de vuelta a Venezuela, explicó la policía. En un video publicado en el cibersitio de noticias G1, puede escucharse a un hombre gritando “Fuera. Fuera. Vuelvan a Venezuela”. Wandenberg Ribeiro Costa, uno de los organizadores de la manifestación del sábado, dijo a G1: “Hemos expulsado a los venezolanos”.
Claudio Lamachia, presidente de la Asociación de Abogados de Brasil, dijo en un comunicado que la violencia registrada en Pacaraima “expuso el drama humanitario que afecta a nuestros vecinos, que están intentando mejorar sus vidas y sobrevivir”. “El estado de Roraima no tiene las condiciones para albergar a todos los inmigrantes”, señaló, apuntando que cada día llegan a la región unos 800 venezolanos.
Ante la crisis, en los últimos meses las autoridades intentaron limitar los servicios a los venezolanos y cerrar temporalmente la frontera. El gobierno federal y los tribunales impidieron estas propuestas. (AP y EFE)
Las noticias locales nunca fueron tan importantes
SUSCRIBITE