Canceló su boda porque los invitados no quisieron pagar
Edición Impresa | 5 de Septiembre de 2018 | 02:55

Una mujer canadiense canceló su boda después de fracasar en su intento de cobrarle 1.500 dólares canadienses -unos 44.000 pesos argentinos- a cada uno de los invitados al evento.
La mujer, identificada solamente como Susan, quería cubrir los gastos de su boda cobrándoles a los invitados por asistir al casamiento, pero nadie quiso pagar.
La mujer pretendía cobrar 1.500 dólares canadienses a cada invitado hasta juntar los 60 mil (1.774.200 pesos) que iba a costar la boda que había soñado y que le permitiría “ser Kim Kardashian por un día”, dijo.
Según escribió la mujer en su cuenta de Facebook: “¿Cómo podríamos tener nuestra boda que soñamos sin la financiación adecuada? Nos sacrificamos mucho y solo le pedimos a cada invitado alrededor de 1.500 dólares”.
Susan dijo en su publicación que una vez enviadas las invitaciones, y solicitudes de donación de dinero, sólo ocho personas confirmaron su asistencia.
Dijo sentirse molesta porque sus amigos y familia, incluso su dama de honor, se negaron a hacer su aporte económico a la boda.
Los novios cancelaron el evento tan solo cuatro días antes, al no tener los medios para pagar la cuenta.
“Queridos amigos, con gran tristeza estoy anunciando la cancelación de la boda. Me disculpo por cancelar solo cuatro días antes. Desafortunadamente, mi novio y yo hemos roto debido a algunos problemas recientes e irreparables. Hemos decidido poner fin a nuestra relación y no avanzar en ningún procedimiento futuro”, inició en su “comunicado”.
Tras eso, las amables palabras de Susan se alteraron, para culpar a los invitados sobre el fin de su relación porque no quisieron poner la cantidad solicitada para que ellos lograran tener la boda que habían soñado.
Susan relató que la familia de su novio se había ofrecido a dar 3 mil dólares y su dama de honor 5 mil, pero que ambas partes, más tarde, declinaron su ofrecimiento con excusas.
El novio trató de arreglar la situación sugiriendo que se fugaran a Las Vegas para casarse y reducir los costos, pero esa propuesta disgustó a la mujer.
“Me reí en su cara, pero él hablaba en serio. Él quería esas bodas baratas, inmundas, como Las Vegas. Quiero decir ¿Qué mierda? ¿Estaba loco?”, dijo.
Además, después de escucharlo hablando a sus espaldas, ella decidió terminar cualquier compromiso con él.
“Solo quería ser Kim Kardashian por un día y luego vivir mi vida como siempre”, dijo la mujer antes de terminar el mensaje despotricando contra todos y anticipando que se iría de viaje por América del Sur durante los próximos dos meses.
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