La mujer quemada en El Mercadito denunció que además fue apuñalada

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Juana Brítez Rojas (34), la joven que el viernes último ingresó junto a su pareja Isidoro Brizuela (26) -ambos con quemaduras en el cuerpo- al hospital San Roque de Gonnet, continúa internada en terapia intensiva. La mujer cursa un embarazo de cinco meses y según pudo saber este medio, el bebé se encuentra estable.

La Policía investiga el episodio, que dejó a ambos con heridas severas, y terminó causando el deceso de Brizuela.

Como se informó el hombre falleció el lunes por la noche, tras permanecer internado cuatro días en estado crítico.

En tanto, Brítez Rojas “sigue en terapia y hay que esperar la evolución, cómo va pasando los días”, refirió su hermano Gustavo.

“Si le sacan los medicamentos ella se quiere mover y eso le hace mal”, agregó. El joven comentó además que la mujer que trasladó a Brítez Rojas al sanatorio le aseguró que ésta le contó lo que había pasado esa noche del 18 de enero.

Según su testimonio, cuando llegaron al hospital, Juana le dijo a la vecina que, después de una fuerte discusión, Brizuela “la había cortado” con un algún elemento no precisado y que luego “intentó quitarse la vida” rociándose con algún tipo de líquido combustible para prenderse fuego.

Siempre de acuerdo al relato de la testigo, Brítez Roja intentó socorrer a su concubino y, en ese proceso, terminó herida.

“El auto quedó lleno de sangre y restos”, agregó la mujer.

Allegados a la causa indicaron que Brizuela tenía una hermana que vivía en la localidad de José C. Paz y un padre en Paraguay, que estaría viajando para reconocer el cuerpo.

Gustavo Brítez Rojas le aseveró a EL DIA que Brizuela “la tenía amenazada porque Juana lo echaba de la casa cuando tomaba y se ponía violento. Entonces él le decía que la iba a prender fuego”.

Esa “compleja relación” perjudicó la relación de Juana con su familia y hasta con sus amigas.

Un portavoz oficial reveló que “no hay denuncias previas contra Brizuela por violencia de género”.

 

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