Bajo un calor aplastante, rescataron dos caballos
Edición Impresa | 30 de Enero de 2019 | 01:31

Estas temperaturas agobiantes, que ponen en riesgo la salud de la gente que no se hidrata debidamente, afectan también, se sabe, a todas las especies vivas. Ayer la Región ardió. Con una sensación térmica que volvió a superar los 40 grados, las calles de la Ciudad parecieron, por momentos, estar entre llamas. En ese contexto, el Municipio rescató a una yegua que arrastraba un carro en las calles de Villa Elisa y a un potrillo, por demás debilitado, en la zona del Bosque. Son varios los ejemplares equinos que se vienen secuestrando en los últimos meses de las actividades, ilegales, que utilizan la tracción a sangre. La mayoría de esos salvatajes se producen a partir de denuncias de vecinos y de entidades proteccionistas que detectan casos de maltrato animal.
Ahora, a través de un trabajo articulado entre diversas áreas comunales y la Policía Local, la dirección de Protección Animal atendió ayer dos denuncias. Por un lado rescataron y pusieron a resguardo una yegua que trasladaba en el camino Centenario a la altura del arco de la calle 403 un carro de cartoneo con excesivo peso y un potrillo con heridas múltiples en todo el cuerpo en la zona de avenida 122 y 50.
Al revisarla por personal especializado, se constató que la hembra, que se calcula tendría unos 6 años, circulaba con una carga por demás pesada en muy malas condiciones de salud, pues estaba deshidratada y con alta temperatura corporal. Por su parte, el potrillo de unos cuatro meses, fue encontrado en pleno paseo del Bosque con un grave cuadro de debilidad.
La directora de Protección Animal del Municipio, Dolores Oliva De Losa, detalló sobre el caso del potrillo que “se le encontraron mataduras propias del arnés en todo el cuerpo, bajo peso y signos de hipertermia e hiperventilación”. El animal, destacó la funcionaria, estaba tan debilitado que prácticamente no podía caminar”.
Por último, informaron fuentes municipales, que ambos equinos rescatados fueron puestos a resguardo en el campo municipal a cargo de veterinarios pertenecientes al área de Protección Animal, donde se realizan tratamientos de vitaminas y alimentación.
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