La bajante del Río de la Plata amenaza con dejar “secas” las canillas de la Región

Una marcada bajante del Río de la Plata dejó ayer al descubierto una extensa playa que modificó el paisaje habitual de la costa regional para asombro de los lugareños. La pronunciada merma en el nivel del río repercutió en la producción de agua potable de la Planta Potabilizadora Donato Gerardi, que según informaron desde Absa “ha disminuido”, por lo que el fenómeno amenazaba con “secar” las canillas de la Región.

Desde la empresa que distribuye el agua potable en la Región señalaron que “debido a los fuertes viento y las condiciones climáticas que se registran en estas horas, el Río de La Plata presenta una bajante que dificulta el normal funcionamiento de la Planta potabilizadora de agua, ya que la misma se nutre del curso hídrico mencionado”, informaron oficialmente.

Por tal motivo, señalaron, “la cisterna de agua tratada de Punta Lara se encuentra baja y se ha decidido parar un equipo en la Usina Bosques, por lo cual se podrá registrar baja presión en algunos sectores del casco urbano”.

Por estas complicaciones, ayer en la redacción de EL DIA comenzaban a recibirse llamados en los que usuarios daban de los primeros signos de baja presión en los hogares.

Sobre esta situación, desde Absa dijeron que “ni bien las condiciones climáticas lo permitan el servicio se normalizará paulatinamente”.

Ayer el Servicio de Hidrografía Naval informaba que el río se encontraba “setenta centímetros por debajo de los valores indicados en las tablas de marea; luego aumentando hasta treinta centímetros por debajo de estos”.

Para el Puerto La Plata se esperaba a las 21 una altura de 0.95 metros y para las 03.00 de 0.40 metros.

Después de las crecidas de esta semana que impidieron el escurrimiento del agua de las inundaciones; una crecida en el Río de la Plata había provocado un “tapón” que impidió el desagote normal de la cuenca del río Matanza.

Como se recordará, esta no es la primera vez que en la Región se genera un fenómeno de estas características en lo que va del año. En junio pasado, la falta de agua por la bajante del Río de la Plata generó grandes complicaciones.

“La máxima bajante la registramos en 1984 cuando hubo menos 3,66 metros en el Puerto Buenos Aires”, aproximadamente cuatro metros menos que el valor de marea astronómica, se explicaron por entonces especialistas a este diario.