Disparos, peleas y tensión: Villa Alba vive en vilo desde que arrancó la ocupación

Desde que a principios de agosto comenzó a tomar forma una masiva usurpación de un predio de seis hectáreas, nada volvió a ser igual para los vecinos históricamente radicados en el barrio de 602 a 604, entre 119 y 121 bis, en Villa Alba. En las últimas semanas, las detonaciones, las peleas y los servicios básicos que comienzan a flaquear se convirtieron en el denominador común de una zona que cambió drásticamente su perfil.

Así lo cuentan los vecinos de la zona, que este viernes otra vez estuvieron en vilo por episodios de violencia en torno a la toma ilegal de terrenos: primero fue una pelea en la que se cruzaron dos facciones (aparentemente por cuestiones vinculadas a los terrenos) y en la que una mujer que quiso intervenir terminó con heridas; luego fue, cerca de la medianoche, cuando se escucharon decenas de disparos hacia del interior del predio que alteraron a todo el barrio.

“No quedó claro qué fue lo que pasó, pero parecía un enfrentamiento a los tiros. Esto es cada vez más común y nos preocupa porque no podemos vivir en paz”, alertó una vecina que mantuvo en reserva su nombre. “Ya no tiene vuelta atrás”, lamentó otro vecino, al referirse a la consolidación de la ocupación ilegal ante la inacción policial y judicial. “La Policía ni se acercó, la inseguridad es permanente”, afirman.

La ocupación, que arrancó a principios de agosto, sigue creciendo. “Ya hay gente que está construyendo casas de material. Y como están todos enganchados a la luz y el agua, en nuestras casas ya empezamos a padecer baja presión y oscilaciones de tensión. Estamos cansados de reclamar a las empresas, pero no intervienen”, admiten en el barrio.

No todos los coparon el predio, de propiedad privada, tienen intenciones de quedarse. “Muchos están revendiendo los lotes, por eso no se quedan por las noches, sino que regresan a sus hogares”, explican.