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ABSA EN VILLA ELISA

Adriana Gorza sostiene: “Ya no es cuestión de presión. Ya nos hemos resignado y tratamos de solucionarlo como podemos. El tema es lo que se vuelve a repetir desde hace al menos 8 años. Un poco de calor y directamente se interrumpe la provisión de agua totalmente. Son horas que no llega una gota de agua por la red. Los reclamos, infinitos. Cuando después de media hora en el teléfono conseguí que me atendieran, reconocieron que había ‘infinidad’ de reclamos y que “mañana” irían a ver que ocurría. Hasta presentaciones ante la Autoridad del Agua que depende del Ministerio de Infraestructura. Jamás una mejora pero sí aumentos regulares de la cuota mensual: la última $1799,94. ¿Qué pretenden?. Los ciudadanos nos sentimos rehenes de ABSA. ¿En qué condiciones vamos a trabajar mañana? ¿Y la higiene en la alimentación? Propongo a los damnificados unirnos para reclamar ante la Justicia.”

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