Van a sumar 200 nuevos coches a la flota del ramal Roca

Desde Transporte buscan mejorar el servicio, “alargar” los convoyes y retirar, de a poco, las viejas formaciones que todavía circulan

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Después de varias idas y venidas, la línea ferroviaria Roca sumará doscientos coches nuevos a su flota, con el objetivo de mejorar el servicio, “alargar” los convoyes y relegar paulatinamente a los veteranos coches que iniciaron su prestación cuando se electrificó el primer ramal, hace más de treinta años.

Así lo confirmaron desde el ministerio de Transporte nacional, que logró garantizar el financiamiento necesario para la adquisición, cercano a los 278 millones de dólares. Con el arribo de estas unidades rodantes cero kilómetro, que serán fabricadas en China y contarán con aire acondicionado y frenos automáticos, “se podrá aumentar en un veinte por ciento la capacidad de la línea”, anticiparon los funcionarios.

La línea Roca es la más utilizada del área metropolitana, a lo largo de 2018 batió todos los récords de venta de pasajes, con el aporte del recientemente electrificado ramal entre nuestra ciudad y plaza Constitución. En total, los diferentes servicios que cubren el sur y el sudoeste del Gran Buenos Aires transportan a más de 600 mil pasajeros por día.

Además del nuevo material rodante, la compra incluye el software para operarlo y chequearlo, la capacitación del personal, los repuestos y otras mejoras tecnológicas. En este marco, esperan que las incorporaciones se traduzcan en una ampliación de la capacidad, modernización del equipamiento, mejor iluminación, menores costos de mantenimiento y nuevos servicios para el pasajero, por ejemplo la presencia de pantallas informativas informando acerca del estado del servicio.

“Estamos haciendo inversiones muy importantes en todo el sistema ferroviario, con nuevos viaductos, electrificaciones, frenado automático para los trenes, renovación de vías y sistemas de comunicación y señalamiento” destacó el ministro del área, Guillermo Dietrich.

El funcionario agregó que “a partir de esta compra se sumará un coche adicional a las formaciones promedio que hoy ya existen, que pasarán de 7 a 8 vagones, por lo que cada una podrá transportar más pasajeros y con mayor comodidad.”

En la actualidad, el Ferrocarril General Roca presta servicio con veinte formaciones con motores Toshiba -los venerables japoneses que debutaron cuando fue electrificada la vía Temperley- y 42 formaciones chinas CSR/CRRC Sifang.

Los nuevos vagones tendrán como destino reemplazar a los que ya superaron con holgura su vida útil recomendada, que es de unos treinta años. Serán del tipo EMU (por Electric Multiple Unit, “unidad eléctrica múltiple”) con capacidad total para dos mil personas, aire acondicionado, iluminación LED, cartelería digital, sistemas de información visuales y auditivos, puertas “inteligentes” y furgón para bicicletas.

Pueden desarrollar velocidades de hasta 120 kilómetros por hora, pero es inusual que superen los 90. De acuerdo con los voceros de Transporte, habrá antes del fin de 2019 unas 62 formaciones completamente nuevas, con todas las comodidades, más suspensión neumática, y ahorro en el consumo energético.

Con un trazado de 237 kilómetros, 69 estaciones y 8 ramales, la línea Roca tuvo sus primeros ramales eléctricos -a Temperley, Glew y Ezeiza- en noviembre de 1985, tras la inauguración realizada por el presidente Raúl Alfonsín.

Frentes de obra

En la Ciudad avanzan varios frentes de obra vinculados a la electrificación del ramal Roca. Por un lado, la remodelación de los talleres de Tolosa; por otro, el paso bajo a nivel de 1 y 32, cuyo inicio de obras es inminente. El techo de 1 y 44, en cambio, sigue esperando.

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