Boca fue una fiesta y hundió más al Ciclón
Edición Impresa | 10 de Marzo de 2019 | 05:27

Boca aplastó a San Lorenzo por 3 a 0 y todavía mantiene chances matemáticas de luchar por el título de la Superliga. El Ciclón sigue navegando en aguas turbias.
El partido comenzó a pedir de Boca. Porque el equipo salió a ganar el protagonismo y se plantó de manera decidida sobre terreno rival desde el pitazo inicial.
Gracias a esa postura de protagonismo, avisó de inmediato a través de una pelota parada y segundos después abrió el marcador con un verdadero golazo. El local presionó sobre la salida del Ciclón, robó una pelota y Mauro Zárate, tras controlar la pelota, sacó un disparo desde afuera, con efecto, gran precisión y esquinado, que se clavó en el palo izquierdo de la portería visitante. Una vez más, el ex Vélez demostró su gran pegada con un zapatazo notable que destrozó el arco de los de Boedo.
El gol pareció desplomar a San Lorenzo. La crisis que vive el Santo recibió una rápida estocada con el tempranero gol xeneize y pareció haberle quitado confianza a los de Almirón.
Les llevó un buen rato recuperarse de ese cachetazo prematuro. Es más, un rato después Boca pudo haber ampliado el marcador, en una chance de gol inmejorable que desperdició Ábila por una mala definición, al estar cara a cara con Monetti.
En los últimos cinco minutos del acto inicial se vio lo mejor de la visita. Despertó de la siesta el azulgrana para emparejar todo y generar situaciones claras de gol. La mejor de todas, en el último suspiro del capítulo inicial, fue la de Reniero, que estrelló su chance en el travesaño.
El Ciclón tuvo más la pelota en los primeros 45 minutos, pero Boca fue más en creación de situaciones hasta los minutos finales, en los que esa posesión de balón estéril se convirtió en generación de jugadas de riesgo. Sin embargo, la historia culminó con la ventaja boquense por la mínima diferencia cuando se fueron al descanso.
El inicio del complemento tuvo puntos de contacto con lo que se había dado en el comienzo del primero: otra vez San Lorenzo dormido y recibiendo una estocada a fondo del local. Al minuto de juego, Sebastián Villa sacó un gran disparo ante la dispersa defensa del Ciclón, que rebotó en el palo izquierdo de Fernando Monetti. Otro aviso azul y oro, otra mueca de preocupación para los de Boedo.
San Lorenzo siguió con serios problemas para contener por las bandas. Por allí, Villa tiró un buscapié a los diez minutos que bien pudo haber terminado en otra conquista para los de la Ribera. Esta llegó a los 19 minutos, por un gran centro de “Bebelo”, que capitalizó Nández para el 2 a 0.
Y hasta hubo espacio para la polémica. Porque a los 25 minutos fue expulsado por una agresión Fernando Monetti. Lo insólito es que el árbitro, que debió haber sancionado, además, penal, sólo optó por la sanción disciplinaria aduciendo que antes había existido obstrucción. Horror arbitral.
En el tramo final, con San Lorenzo perdido, Villa puso el 3 a 0 definitivo para terminar de hundir al Ciclón.
Las noticias locales nunca fueron tan importantes
SUSCRIBITE