La famosa caja de confort

Qué es, para qué y cómo salir.

Por Lic. Rocío Biroli

 

Tanto escuchar hablar de ella, tanto leer, tanto repetir frases que parecen de sobrecito de azúcar pero que, cuando estás atravesando cambios, te das cuenta de la razón que tenían!

Empecemos por aclarar las dudas: ¿qué es la caja de confort?

Se trata de ese espacio donde nos movemos con comodidad, ese lugar conocido, un lugar seguro. Aunque solemos también encontrar algunos miedos ahí dentro, son miedos “conocidos” que nuestros mecanismos han sabido adaptar.

Hasta acá no estaría planteando nada como para que emprendamos el camino de la retirada y ver que hay afuera de la famosa cajita.

Si nos movemos en un entorno seguro, nos sentimos completos y felices, ¿dónde estaría el problema?

En mi opinión el problema es que la gran mayoría de las personas no están plenas y felices, sino que están mal pero acostumbradas. Y realmente piensan que “ese espacio” es “la realidad”, la única posible. Y fuera de ella quedan los sueños. Tan soñados como inalcanzables.

Pero, si nos preguntamos ¿qué pasaría si esos sueños formaran parte de lo que llamamos “realidad”?

 

Entonces, hoy, le hago lugar, le doy luz y todo mi respeto a ese proceso que amplía, ayuda a crecer, a ver la vida desde otra perspectiva, a descubrir nuevos horizontes que de otra forma nunca hubiéramos observado y que es tan desagradablemente asqueroso.

Porque sí! digamos las cosas como son. Cambiar duele, es horrible y se siente de lo más incómodo.

Más incómodo que usar zapatos un número más chicos, más incómodo que estar en un cumple sin ganas.

Tomar la decisión de movernos de “lo conocido”, de “a lo que estamos acostumbrados” es una sensación tan fea como vomitar (al menos para mí, claro)

Y para que hago esto, para qué me expongo a tanto esfuerzo a tanto tránsito pesado en donde, al menos, durante el momento en que lo estoy pasando no me llevo ningún beneficio.

Y, claramente como la leyenda irlandesa, al final del arcoíris nos espera la gran olla de oro, es allí  donde está la recompensa. No en lo pesado, incómodo (creo que lo dije ya) o desequilibrante que pueda llegar a resultar salirnos de nuestra caja de confort, es al final, cuando logramos pasar la rompiente, dejar esas paredes cómodas, pero que por alguna o varias razones no nos servían más, al menos si lo que queremos es crecer, es cambiar, es mutar. Es pasar por esta vida y que al final podamos decir: “mirá todo lo que hice, por todos los lugares que me moví, todo lo que intenté, en todo lo que fallé, mirá como me comprometí, mirá como cambié, mirá como lloré, mirá en todo lo que fallé pero que si no hubiera probado nunca me hubiera dado cuenta por donde sí tenía que ir”.

De eso se trata, creo yo.

No salir de nuestra zona de confort puede llegar a convertirse en una gran barrera y limitación personal, ya que perdemos la oportunidad de enfrentarnos a nuevos desafíos, vivir nuevas experiencias, o incluso conocer gente nueva. No abandonar jamás el entorno conocido hará que disminuyan progresivamente nuestras habilidades, y que nuestras expectativas se reduzcan cada vez más. Y esto no sería tan grave si no fuera porque con esa actitud también podemos ver coartada nuestra capacidad para ser felices.

 

¿Y las recetas? tengo noticias!!!! No hay.

O si, tal vez sí. La receta es caminar. Probar hacer algo distinto a lo que estamos acostumbrados.

No es un consejo, pero si una linda recomendación: proponete disfrutar en el camino, salite del drama, ya sabés que va a ser incómodo (te lo repetí como 15 veces), pero sabemos que es parte de las reglas del juego. Probá incorporarlas como parte de la aventura.

La incertidumbre viene en el combo. Hay cosas que si están bajo nuestro dominio de acción. El resto es sorpresa. Y que sería de una primera cita sin esa cuota de ¿cómo será?”,¿que sería de una fiesta si supiéramos a cada momento lo que va a pasar? ¿Y de ir al cine sabiendo el final de la película?, ni les digo.

Teniendo estos detalles en cuenta quizá podamos incorporar que la incertidumbre es parte de la vida, y que bueno que así sea! La buena noticia es que venimos preparados a jugar el juego solo que no estamos entrenados o simplemente nos olvidamos.

Los invito a reflexionar sobre sus vidas así como están y preguntarse ¿estoy feliz y completo? Si la respuesta es sí, continúen como vienen. Si es no, ya saben que hay cosas que podemos hacer.  

Y recuerden: Las instrucciones para salir de la caja de confort están del lado de afuera.

 

Ante dudas o sugerencias contactame:

https://www.instagram.com/rociobirolicoaching/

https://m.youtube.com/user/rociobiroli

rociobiroli@gmail.com 

Las noticias locales nunca fueron tan importantes
SUSCRIBITE