Familiares de víctimas de la violencia marcharon en La Plata por Justicia

Edición Impresa

“Tenemos que hacer esto porque si no no nos escuchan”, dijo Cintia Evelin Wilchez, madre de Leandro Wilchez, el chico de 16 años que el 29 de diciembre pasado fue asesinado de una puñalada debajo de la axila en medio de un conflicto en Berisso.

Con la cara y el nombre de su hijo estampados en una remera blanca, Cintia marchó ayer al mediodía entre decenas de familiares de otras víctimas de la violencia que viene golpeando fuerte en la Región. Los nombres son muchos: Gustavo Gabriel Petell (asesinado en una presunta disputa por una joven); Nicolás Pérez Gatti (el repartidor ultimado en un asalto); Jorge Gómez (el taxista muerto a golpes en Ensenada): Miguel Heredia (ejecutado en Tolosa); Brian Genasis (lo prendieron fuego en El Mercadito); Alejandro Gago (falleció en un accidente en Berisso); y Maximiliano Alvarado (un joven lo mató clavándole un objeto punzante en el cuello), por mencionar apenas algunos. Bajo un sol abrasador, los manifestantes marcharon hasta 7 y 50. “En el caso de mi hijo el acusado está detenido, pero pedimos un cambio de carátula, de homicidio simple a premeditado y que lo juzguen, ya que es menor y tiene una preventiva por seis meses”, amplió Wilchez.

En relación con la convocatoria de ayer, explicó que “marchamos juntos porque somos muchos papás que estamos destruidos y nos juntamos para pedir justicia”, ya que algunos de los imputados “quedaron en libertad, o están prófugos”.

De la marcha participó también la madre de Renzo Villanueva, el nene de 7 años con síndrome de Down que murió el 10 de octubre de 2017 al caer de la ventana de un séptimo piso en un edificio situado en 9 entre 55 y 56.

Por el caso irán a juicio su padre, Diego Villanueva, y su pareja, Rosa Martignoni. El debate comenzará el 5 de marzo.

 

Las noticias locales nunca fueron tan importantes
SUSCRIBITE