Asma y coronavirus, una relación en debate científico
Edición Impresa | 5 de Mayo de 2020 | 03:24

Según estimaciones de la OMS, hay actualmente más de 300 millones de pacientes con asma, una de las enfermedades crónicas más frecuentes, y la más prevalente en los niños. Hoy se conmemora el Día Mundial de esta enfermedad, lo que adquiere un marco especial dada la pandemia por coronavirus que atraviesa el mundo. Sin embargo, especialistas de la Asociación Argentina de Alergia e Inmunología Clínica (AAAelC) refirieron que los pacientes con asma no mostraron tener un riesgo mayor de complicaciones frente al coronavirus como sí ocurre con los de edad avanzada, hipertensos y quienes sufren obesidad.
No obstante, y ante la preocupación de los pacientes asmáticos por la pandemia del coronavirus, la Asociación señaló que “los tratamientos para la alergia y el asma no protegen ni empeoran la infección por SARS CoV-2, pero sí mejoran su condición de alérgico, por tanto tampoco deben modificarse, ya que la alergia cumple un rol importantísimo en el origen de la enfermedad, siendo su principal mecanismo de producción”, por lo que insistió en “no suspender el tratamiento habitual del asma”.
Alejandro Videla, profesor de la Facultad de Ciencias Biomédicas de la Universidad Austral, señaló que “para la situación actual, además de las recomendaciones hechas para toda la población, se recomienda que las personas con enfermedades respiratorias mantengan sus medicaciones de base, reciban la vacunación antigripal y contra el neumococo si tienen indicación de vacunarse”.
Cabe destacar que al inicio de la pandemia, los pacientes con esta patología fueron señalados dentro del grupo de riesgo por tratarse de un virus respiratorio. Al respecto, Videla expresó que “el coronavirus es un virus de impacto respiratorio y causa frecuentemente neumonía, por lo que tener una edad avanzada y padecer una enfermedad subyacente, como las pulmonares, se consideran factores de riesgo asociados con peor evolución”.
Desde la Asociación Argentina de Medicina Respiratoria, en tanto, se señaló al respecto que “en el caso de pacientes con Asma Bronquial no existe evidencia comprobada hasta la fecha que presenten mayor riesgo de infección por coronavirus que la población en general, pero la OMS indicó que padecer asma así como también otras enfermedades respiratorias crónicas, ponen al paciente en un riesgo mayor al estar infectado”.
“Y si bien no hay suficientes datos de COVID-19 en pacientes asmáticos -agregó la entidad- otras infecciones virales del tracto respiratorio (virus sincitial respiratorio, rinovirus, influenza A y B, para influenza, adenovirus y otros coronavirus) pueden provocar exacerbaciones de asma, lo que haría suponer que el SARS-CoV-2 (COVID- 19) también aumentaría el riesgo de crisis asmática en niños y adultos y, como consecuencia, aumentaría el volumen de consultas a salas de emergencias y de hospitalizaciones”.
UNA COMPLICACIÓN CRÓNICA
El asma es una enfermedad inflamatoria crónica de la vía respiratoria caracterizada por ataques recurrentes de tos, sensación de falta de aire y sibilancias (silbidos en el pecho) que varían en severidad y frecuencia. Los síntomas pueden presentarse de manera intermitente o persistente, y en algunas personas se agravan durante la actividad física, con las infecciones virales, con la exposición a alérgenos, y en algunos casos por la noche. En el asma, mantener la vía aérea desinflamada es fundamental para disminuir las posibilidades de exacerbaciones que pueden obligar a tener que concurrir a guardias con el riesgo de exposición.
“Vivimos un tiempo de pandemia -señala el doctor Pablo Moreno, titular de la AAAeIC- y los pulmones son uno de los órganos principalmente afectados, donde se destaca la virulencia con que lo ataca siendo potencialmente fatal. Por esta razón los millones de pacientes asmáticos se encuentran sumamente preocupados, aunque los pacientes con asma no han mostrado tener un riesgo mayor de complicaciones”.
“Uno de los problemas que enfrenta el médico al momento de tratar a un paciente con asma, -señala el doctor Gabriel García, director del Departamento de Asma de la Asociación Latinoamericana de Tórax (ALAT)- es lograr una correcta adherencia al tratamiento, ya que suele ocurrir que al notar una mejoría, el paciente tiende a dejar de utilizar el tratamiento prescrito”.
La misma entidad estima que alrededor de 4 de cada 10 pacientes asmáticos siguen el régimen de tratamiento completo prescripto por su médico.
Las noticias locales nunca fueron tan importantes
SUSCRIBITE