Una policía porteña visitó a un preso de la Unidad 9 con pastelitos con droga

Edición Impresa

Una mujer que presta (¿o prestaba?) servicios en la Policía de la Ciudad de Buenos Aires llegó el martes a la Unidad 9 de La Plata para visitar a un interno que cumple una condena a 10 años de cárcel por robos agravados, con pastelitos caseros. Lo que parecía un simple gesto de amabilidad se convirtió en la evidencia de un delito: no estaban rellenos con dulce de batata o de membrillo, sino con 28, 07 gramos de marihuana y 9,5 de cocaína.

Las noticias locales nunca fueron tan importantes
SUSCRIBITE