Lo asesinaron de dos tiros cuando intentaba recuperar el DNI de su hija

Faltaban apenas unos minutos para las 23 y en la cuadra de 52, entre 149 y 150, varios vecinos disputaban en la vereda un torneo de “piki vóley”, el juego que fusiona fútbol y vóley, muy popular en Paraguay.

Los encuentros se habían desarrollado durante toda la tarde en medio de un clima de fraternidad y risas entre paisanos de la colectividad paraguaya hasta que un episodio de violencia seguido por un robo rompió con la calma y se convirtió en el desencadenante de una tragedia.

Según indicaron los vecinos que presenciaron el hecho, un sujeto de unos 30 años que iba pasando por el lugar golpeó a otro de 25 y lo despojó de varios teléfonos celulares y billeteras propiedad de los jugadores pero que se encontraban bajo su custodia. Concretado el robo, el ladrón se dio a la fuga hacia calle 152 y de forma inmediata uno de los vecinos que se encontraba jugando se fue tras el sospechoso para tratar de recuperar sus pertenencias.

En el barrio contaron ayer que el apuntado como el responsable del robo es conocido por los atracos que viene cometiendo desde hace años contra los vecinos de la zona. Es por ello que todos conocían dónde quedaba su lugar de residencia.

“Todos vimos que ese tipo le pegó al chico y le sacó los teléfonos”, señaló un testigo. Fue así que Jorge González, un hombre de 37 años, emprendió el camino que lo separaba de su casa hasta la vivienda del presunto ladrón.

Testigos que presenciaron la escena aseguran que al llegar a la esquina de 50 bis y 152, González se topó cara a cara con el ladrón a quien le exigió que le devolviera la billetera. “El celular era viejo y no le importaba. Él lo único que quería recuperar era el DNI de su nena que estaba en su billetera. La amaba y sólo vivía para ella”, precisó.

Jorge no fue el único que se dirigió al lugar. Un grupo de vecinos también decidió ir al lugar para apoyarlo en su reclamo. “Estamos cansados de que nos robe y pensamos que si nos veía a todos, el tipo nos iba a devolver las cosas”, aportó otro frentista que estuvo en el momento del tiroteo que terminó con un herido y un fallecido.

Convencido de que el sujeto no le iba a devolver su billetera, Jorge desistió y abandondó la escena. En el camino de regreso se encontró con el grupo de vecinos que se dirigía a la casa del ladrón quienes lo motivaron para que regresara al lugar a recuperar sus objetos de valor. Fue en ese marco que decidió volver a 50 bis y 152 para renovar su pedido al malviviente de que le devolviera los elementos robados.

Siempre en base al testimonio de los vecinos, cuando llegaron a la esquina el agresor se encontraba en la puerta de su casa y sin mediar palabra sacó un arma de entre sus ropas y comenzó a disparar “a matar”.

“Todos vimos cuando sacó el arma. Empezó a tirar para todos lados. Pero no es que tiraba al aire para asustarnos. Nos apuntó al cuerpo. Habrá disparado como ocho veces”, precisó uno de sus vecinos.

Se cree que uno de esos disparos fue a dar a la humanidad del joven de 25 años que había sido golpeado y asaltado momentos antes por el presunto atacante y que otros dos proyectiles impactaron en el brazo izquierdo y en una de las piernas de González.

“Todos intentamos escapar y escondernos. Menos Jorge, que estaba en el piso. Lo levantamos como pudimos y lo llevamos a su casa mientras íbamos llamando a la ambulancia”, indicó.

Fuentes policiales indicaron que el disparo que González recibió en la pierna dañó la arteria femoral provocándole una hemorragia.

“Me enteré e inmediatamente acudí a ayudarlo. Cuando llegué a la casa estaba con la pierna bañada en sangre. Después de esperar a la ambulancia, decidimos cargarlo en un auto particular y llevarlo nosotros. Justo llegó la policía y nos escoltó hasta la UPA”, destacó otro vecino de la zona.

En la misma línea precisó que cuando llegó al centro de salud “ya estaba inconsciente”.

Tras recibir los primeros auxilios en la UPA de Los Hornos, González fue derivado al Hospital San Martín en donde falleció horas después. Se consumó así el segundo crimen del año en la Región.

En cuanto al joven de 25 años, se supo que recibió las curaciones correspondientes en su mano derecha y que se encontraba fuera de peligro y recuperándose.

Sobre el presunto agresor, la policía señaló a este diario que tras la balacera, se dio a la fuga pero gracias a un operativo cerrojo lograron capturarlo y quedó a disposición de la Justicia en una causa por homicidio que instruye el fiscal penal en turno, Juan Menucci (UFI Nº 5).