Las medidas restrictivas que la Rosada evalúa para después de Pascuas

El gobierno de Alberto Fernández ve con buenos ojos la decisión del Gobernador bonaerense, Axel Kicillof, de suspender actividades nocturnas y limitar las reuniones sociales. Tanto que esas medidas que rigen desde hoy en la Provincia podrían convertirse en una suerte de borrador de lo que pretende la Casa Rosada para después de Semana Santa si los contagios por coronavirus siguen en aumento.

Puntualmente, el Gobierno sigue con especial atención las salidas nocturnas y los encuentros privados en casas, uno de los principales focos de contagios, según se evaluó en la reunión con el comité de expertos que días atrás encabezaron el jefe de Gabinete, Santiago Cafiero, y la ministra de Salud, Carla Vizzotti.

La idea, por ahora, es no ajustar el cinturón hasta al menos después de Pascuas. Mientras, en el Gobierno se enfocarán en medidas de corto plazo y en la “concientización” de la población frente a los riesgos, más que en resoluciones “restrictivas”.

“La idea en cuanto a medidas es no ir más allá de lo que marca la situación y basarse en el corto plazo, para adaptarse a un panorama que se presenta dinámico y cambiante”, reforzaban ayer fuentes gubernamentales.

En esa línea se inscribe, por ejemplo, la decisión de no suspender el turismo por el fin de semana largo, tal como lo anunció en estos días el titular del área, Matías Lammens: “No va a haber restricciones para viajar en Semana Santa”, confirmó y que “se va a poder viajar tal como estaba previsto”. Aunque subrayó que “estamos transmitiendo un mensaje de extremar lo que tiene que ver el cumplimiento de los protocolos” ante el avance de la segunda ola de coronavirus y el ingreso de nuevas cepas al país.

No obstante, en el Gobierno admitían que “si la curva de contagios sigue, no va a haber demasiadas opciones y vamos a tener que aplicar más restricciones”.