Conmoción y bronca en Los Hornos por un chofer de la línea 214 baleado en un robo
Edición Impresa | 24 de Abril de 2021 | 05:13

El jueves último a las 18.30, una caravana de vehículos circulaba por la avenida 137 con las bocinas y las luces “a pleno”. En la vereda, algunos comerciantes se sumaban con aplausos y gritos, mientras que en ciertas esquinas los vecinos mostraban sus carteles con diversas leyendas que apuntaban a lo mismo: el reclamo por la imparable inseguridad que afecta a toda la Ciudad.
Los Hornos no está exento esta problemática, aunque los organizadores de la movida aseguran que desde la llegada del nuevo titular de la comisaría tercera la situación “empezó a mejorar”. Con todo, explicaron que “como se trata de un barrio tan grande, sabemos que los resultados visibles van a llevar tiempo”.
Mientras tanto, los delincuentes siguen ocupados. Ayer a la madrugada, en 60 y 147 asaltaron a un chofer de colectivos de una empresa local cuando estaba por regresar a su casa. Y, como el conductor se resistió, no dudaron en dispararle.
El proyectil impactó en la víctima, identificada como Pablo Sáenz (44), aunque por fortuna no resultó herido de gravedad. En una semana de por sí movida por los robos, el incidente causó bronca entre los frentistas de la zona y también conmocionó a los compañeros del damnificado.
DOS TIROS, UN HERIDO
En el predio que pertenece a la empresa Unión Platense SRL, que opera la línea 214, Alejandro y Marcelo, dos trabajadores de la compañía, dialogaron con EL DIA y afirmaron que la zona “está bastante complicada”.
El ataque a Sáenz sucedió cerca de las 5 de la mañana en la puerta del playón. “Se le acercó una moto con dos tipos, uno le pidió que le diera todo y el otro lo apuntaba”, explicó Alejandro. Los voceros oficiales, en tanto, señalaron que los malvivientes se trasladaban a pie.
Lo cierto es que el trabajador se negó y comenzó a forcejear con uno de los ladrones. En esas circunstancias, la pistola se accionó, hiriendo al chofer en la mano izquierda. Las fuentes consultadas indicaron que los asaltantes llegaron a consumar el robo, aunque se desconoce en qué consistió el botín sustraído.
Por su parte, Marcelo detalló que “un muchacho que estaba adentro del predio se acercó porque vio la situación, y cuando los chorros se iban le dispararon a él también”. Ese proyectil, agregó, “pegó en la pared de una ferretería lindera”.
Enseguida, los presentes dieron aviso a las autoridades. Un móvil de la seccional llegó a la escena y salió en busca de los sospechosos, pero al cierre de esta edición no habían podido dar con su paradero.
Mientras tanto, el herido “se fue hasta la salita y ahí le sacaron la bala que tenía alojada en la mano”, expresó Alejandro. Poco después sería dado de alta, ya que la lesión “no comprometió ninguna arteria, ni parte ósea”, revelaron los portavoces. Sáenz “está bien, dolorido, y con miedo”, añadió.
Minutos después arribó la Policía Científica, que trabajó en el lugar en busca de huellas. También se revisó la cuadra en busca de cámaras de seguridad.
Los compañeros del damnificado afirmaron que “esto (en referencia a ese sector de Los Hornos) es una zona en la que no anda nadie, está toda liberada, acá te da miedo caminar. Una cuadra te da miedo caminarla”.
Asimismo, aseveraron que “hay compañeros que vienen a pie a trabajar y les han robado. Hace 15 días apuñalaron a uno, no lo lastimaron mucho, pero le dieron dos puntadas, en la espalda y en el pecho”. A otro trabajador que circulaba en bicicleta “lo siguieron hasta que no dio más y tuvo que parar y entregar” el rodado, expresaron. En esa línea, reclamaron que “nadie dice nada” y que “venimos con la ropa de trabajo, somos gente conocida, se sabe que somos de la empresa”.
El barrio, sostuvieron, “está bastante complicado, tenemos miedo de venir a trabajar, hoy más que nunca, porque a cualquier hora te puede pasar algo. No ves un patrullero después de las siete de la tarde”.
Por último, resaltaron que “Muchas veces cuando los choferes terminan el turno, al volver a sus autos los encuentran rayados o con las gomas pinchadas. Hay gente que sale a trabajar, la ves en la parada y tiene miedo, y eso que estamos nosotros enfrente”.
“Hace 15 días apuñalaron a un compañero, le dieron dos puntadas, en la espalda y en el pecho”
Alejandro, Trabajador de la Línea 214
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