Advertencia pediátrica: bajó la vacunación de los más chicos y el Covid no terminó
Edición Impresa | 18 de Octubre de 2022 | 04:26

En materia de prevención sanitaria nunca están de más las advertencias y recomendaciones médicas, ya que ellas integran una de las barreras de contención más efectivas contra las enfermedades.
Ahora, especialistas de nuestro país acaban de señalar que se advierte una menor vacunación en los niños contra el Covid-19 y los médicos pediatras alertaron que “la pandemia no se terminó”, de modo que debería completarse la vacunación de los menores entre los 6 meses y 12 años de edad.
Tal como se dijo ayer en este diario, a pesar de que los contagios por Covid-19 siguen en caída, el descenso del ritmo de la vacunación contra el coronavirus en niños de 6 meses a 12 años genera un serio riesgo en la población de esa franja etaria al expandirse ahora en el país la variante Ómicron y sus mutaciones BA.4 y BA.5.
En ese sentido, los profesionales volvieron a advertir sobre los riesgos de no inmunizar con las cuatro dosis a este sector de la población con la falsa idea de que “la pandemia terminó”.
Los profesionales destacaron además que una gran cantidad de niños y adolescentes recibieron en la Argentina como dosis de refuerzo vacunas de virus inactivado “que no protegen frente a estas variantes”, por lo que el año próximo se planifica darles inmunizaciones con la plataformas de ARNM (mensajero) o “vacunas ambivalentes”.
En esto coincidieron pediatras de la Unidad Materno Infantil del Hospital Militar Central; de la división Clínica Médica del Hospital de Niños Ricardo Gutiérrez de la CABA y de la Sociedad Latinoamericana de Infectología Pediátrica, que realizaron estas advertencias ante un grupo de pediatras y clínicos durante una presentación reciente en la Ciudad de Buenos Aires.
Los médicos alertaron que existe hoy un “parate” en la información que se le da un padre que duda en vacunar a su hijo, porque muchos profesionales también tienen una “información desprolija”.
“Los chicos tienen que vacunarse porque se mueren o porque tendrán secuelas, hay datos sólidos y consistentes en todo el mundo de que esto es así y deben inmunizarse con la plataforma de ARNM. Conversar, consensuar y convencer a los padres es lo que deben hacer hoy los pediatras, porque el Covid no es una enfermedad benigna”, refirió uno de los pediatras.
En la reunión se insistió en que “no estamos en el fin de la pandemia” y que la gente cree esto porque lo vincula con una cuestión social. Si no se habla más del Covid y no tenemos amigos o conocidos hospitalizados creemos efectivamente que terminó.
Sin embargo, indicaron que “muchos adolescentes padecen lo que se llaman las secuelas de Covid o Covid-largo, con sus consecuencias en trastornos de personalidad o siquiátricos, este es el tsunami que no alcanzamos a ver del Covid”.
Es cierto que los contagios y las muertes por Covid siguen en retroceso. Pero sobran las evidencias, aquilatadas además como experiencias en esos dos años de pandemia y sumadas al conocimiento médico, de que el flagelo permanece y amenaza con volver a expandirse.
El hecho de que ahora se advierta sobre la necesidad de vacunar a los bebes y a los menores de edad, por cuanto no se está cumpliendo con esta exigencia preventiva, exime de mayores comentarios.
Las advertencias de profesionales con probados antecedentes académicos no admiten dudas al respecto y los responsables adultos debieran acatar esas recomendaciones y hacer vacunar a sus chicos.
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