Ahora hay que estar tranquilos, no hacer locuras
Edición Impresa | 23 de Noviembre de 2022 | 06:21

Por JULIÁN CAMINO (*)
La derrota no estaba en los planes de nadie. Pero en estos momentos hay que mantener la tranquilidad. Es clave. Porque ayer el partido tuvo dos momentos muy diferentes y si la Selección ganaba nadie podía decir que no era justo.
En el primer tiempo Argentina jugó bien. Pero me llamó la atención la cantidad de veces que el equipo quedó en off side. No lo tenía, en detalle, al juego de Arabia Saudita, aunque si siempre lo hace como esta vez, la verdad es que me extraña que Argentina haya quedado tantas veces en off side porque son jugadores de elite, que están acostumbrados a todo tipo de marcación, al achique.
A mi criterio, Argentina jugó bien el primer tiempo, con manejo de la pelota y posibilidades de gol. Fue ganando 1 a 0, y posiblemente si lo hacía por un gol más hubiera estado bien, porque tuvo las situaciones como para hacerlo, frente a un equipo que no inquietó.
Por eso, cuando empezó el segundo tiempo y Arabia Saudita hizo los dos goles en cinco minutos, para mi Argentina se sorprendió mucho, y no lo pudo levantar. Fue un golpe muy duro del que no pudo reponerse y no lo pudo levantar por un par de situaciones.
Primero, porque la defensa de Arabia con el mediocampo se movieron muy juntitos, corriendo a la par, con diez metros de diferencia de una zona a la otra. Entonces, Argentina no pudo meter esos pases en profundidad para que un jugador se pudiera dar vuelta y encarar a un defensor, sino que tuvo que hacer más pases largos y entonces eso, me parece, lo complicó.
Segundo, no tuvo mucho desborde. O los tenía llegaba a posición con centros que cruzaron desde afuera que, por lo general, los cortó algún defensor o el arquero. Y entonces cuando van pasando los minutos el jugador ve que no entra la pelota y empieza a perder la calma, a ponerse nervioso y, naturalmente, entra en un desorden contagioso.
Otro aspecto es más discutible y opinable. Me parece que Scaloni tendría que haber esperado un poquito más para hacer los cambios, pero los hizo enseguida no bien llegaron los goles del rival.
Cuando vas perdiendo, por lo general no hacés los cambios tan pronto sino que esperás hasta los 25 minutos y después ves que variantes podés hacer. Pero Argentina se encontró 2-1 abajo e hizo tres cambios enseguida.
El aspecto físico entiendo que no influyó mucho, por más que habría que ver si estaban tocados el Cuti Romero y Paredes. Pero uno en realidad no sabe por qué fueron esas modificaciones.
Si los jugadores están fisicamente bien, habría que darles otra oportunidad
Para mi, desde afuera, y sin conocer la intimidad, a Romero el técnico lo sacó porque sintió que no estaba bien, que sentía alguna molestia, y a Paredes por lo táctico.
Más allá de esto, a la Argentina, por lo general, los partidos debut se le hacen difíciles, siempre. Si tengo que explicarlo, no lo se. Me tocó estar ahí en el Mundial, contra Bosnia, en Brasil , y nosotros lo ganamos 2-1 “ahí”. No fue algo contundente, sino que fue un debut en el que se ganaron los tres puntos y nada más, pero era lo más importante.
Hay que ver también, y uno tendría que estar ahí adentro para analizar con mayores argumentos, cómo llegaron los jugadores al debut. Si estaban bien., si estaban cansados, descansados... Para hablar de eso tendríamos que estar ahí.
Ahora, para el próximo partido, contra México, lo más importante es estar tranquilos, no hacer locuras. Que un resultado no tire abajo todo, un invicto de treinta y pico de partidos, la Copa América que ganaste. Si los jugadores están bien físicamente habría que darles otra oportunidad. Pero eso lo sabrá mejor el técnico. Hay que ver como están, y si físicamente no se encuentran bien, por supuesto que habrá que hacer los cambios que se tengan que hacer.
Pero si después de este resultado hacés tres o cuatro cambios, para mi sería una locura. Tenés que estar con tranquilidad, pensar con tus ayudantes, analizar bien el partido México-Polonia, qué es lo que le conviene al equipo y después armarlo. Son cuatro días duros.
Lógico que la derrota no es algo bueno, porque a veces jugar mal y ganar es más tranquilizador que perder este partido inaugural. Jugaste mal y ganaste, ya están los tres puntos. Así, como sucedió, se vive un momento difícil.
Todo el grupo, en Qatar, debe tener ganas de estar en una habitación, charlar entre ellos, sobre lo que se hizo bien y lo que se hizo mal, y el cuerpo técnico tener la suficiente tranquilidad.
(*) Ex ayudante Selección
Las noticias locales nunca fueron tan importantes
SUSCRIBITE