Chau al maleficio de los Mundiales jugados en años terminados en 2

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La Selección argentina logró en Qatar 2022 romper la maldición de los Mundiales jugados en años terminados en 2 que la persigue desde Chile 1962, pasando por España 1982 y continuando en Corea-Japón 2002, cuando llegó a cada uno de ellos con el aura de candidato y terminó saliendo prematuramente en la fase de grupos, algo que dejó atrás al clasificarse para los octavos como primero de la Zona C.

En Chile, con el “Toto” Juan Carlos Lorenzo como entrenador, y en el primer Mundial en suelo asiático con Marcelo Bielsa, el representativo nacional quedó eliminado en primera vuelta, mientras que en España, con César Luis Menotti, quedó afuera en la segunda fase de grupos, acorde al formato de los Mundiales de la época.

La Selección albiceleste llegó a los Mundiales de Chile y Corea-Japón tras clasificarse primera en las Eliminatorias Sudamericanas, mientras que en España lo hizo nada menos que como campeona del mundo en Argentina 1978.

En 1962, Argentina estuvo a punto de ser la organizadora de aquella Copa del Mundo, que debía regresar a América tras dos ediciones sucesivas en Europa (Suiza 1954 y Suecia 1958), pero terminó perdiendo en un mano a mano con Chile en una votación realizada en un congreso de la FIFA por 32 a 10, siendo vitales dos frases planteadas como remate de las exhibiciones de los representantes de ambos países.

El recuerdo más fresco se remonta a Corea del Sur-Japón 2002, donde todo apuntaba a la recuperación del título ecuménico tras una Eliminatoria demoledora que acabó clasificando a la Selección argentina a tres fechas de su final con buenas actuaciones ante potentes equipos europeos en amistosos preparatorios.

El sorteo ubicó a Argentina en el Grupo F, donde debutó con una victoria 1-0 sobre Nigeria, para luego perder por el mismo marcador ante Inglaterra y empatar 1-1 con Suecia, que terminó condenándolos al tercer lugar detrás de ambos equipos europeos y sumiéndolo en una frustración que, por lo inesperada, terminó por sacudir con fuerza los cimientos del fútbol argentino, aunque el presidente de la AFA, Julio Grondona, decidió renovar el contrato de Marcelo Bielsa y con ello mitigó algunos daños colaterales.

El cansancio que supuso una excesiva exigencia física a jugadores que venían de una intensa y agotadora temporada europea como Juan Sebastián Verón, Claudio Caniggia, Gabriel Batistuta, Diego Simeone o Hernán Crespo, fue el argumento esgrimido para justificar ese histórico revés mundialista.

Esa fue la última sensación de gran frustración sufrida en un Mundial disputado en un año que terminó en 2. En el primero de los nombrados hubo 16 participantes, en el segundo 24 y en el de Asia fueron 32, la misma cantidad que ahora en Qatar.

 

Qatar2022

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