Argentina

EL CAPITÁN LIONEL MESSI ABRIÓ LA SERIE Y PUSO EL 1-0

No era fácil para el “diez” argentino. Debía patear el primero de la serie para Argentina y ya había ejecutado uno durante el partido, eligiendo el palo izquierdo del arquero que casi quedó parado. En la tanda de penales, Messi, que jamás miró al arquero, eligió cambiar. Casi que con un toque suave, como un pase a la red, pateó al palo derecho, mientras el arquero fue a su izquierda.

LEANDRO PAREDES, FUERTE A LA DERECHA, PARA EL 2-0

Ya había convertido Messi y el Dibu Martínez había atajado dos penales. El volante fue con decisión, acomodó el balón y tras una carrera con pasos cortos, sacó un derechazo fuerte, que ingresó a media altura y muy cerca del poste derecho. El arquero Andries Noppert adivinó la intención, se estiró contra ese palo, pero no pudo llegar por la violencia del remate. Era el 2-0.

EL 3-1 DE ARGENTINA LO HIZO MONTIEL, DE DERECHA

Gonzalo Montiel se hizo cargo de un penal muy importante, porque tras las dos atajadas de Dibu y el primer gol del rival tomó la pelota para ratificar la diferencia de dos goles. El lateral ex River, que no había entrado de la mejor manera en el partido, le pegó de derecha y tras ver que el arquero se arrojaba a su derecha le pegó al palo opuesto, más cercano al medio. Gol para el 3-1.

EL PENAL QUE FALLÓ ENZO Y POSTERGÓ EL FESTEJO

El cuarto penal de la serie era muy esperado porque su convertía se terminaba todo el sufrimiento y Argentina se aseguraba el pase a la semifinal. Pero el exRiver tomó carrera luego de un repiqueteo y con un derechazo envió la pelota unos centímetros por afuera del poste derecho del arquero neerlandés. Se tomó la cabeza y tragó veneno. Por suerte había otra oportunidad.

EL TORO MARTÍNEZ SE HIZO CARGO Y DECRETÓ EL 4-3 FINAL

No era una misión fácil para Lautaro Martínez, que perdió la titularidad y no había podido convertir en el Mundial. Pero el ex delantero de Racing fue el designado para el quinto penal que sería definitorio. El Toro fue con gesto serio, de concentración, acomodó la pelota y tras una corta carrera, sacó un derechazo implacable que entró contra el poste derecho, mientras el arquero fue para el otro lado. Fue 4-3 y festejo.