La nueva Griselda Siciliani: tras trabajar con Iñárritu y ser nominada al Goya, vuelve al teatro

Griselda Siciliani frenó el ritmo frenético que le proponía la tevé y parece elegir cada proyecto nuevo a partir de la pasión y el deseo de ampliar sus fronteras: así, a pesar de haber abandonado una faceta más mediática y televisiva, no para de crecer, y tras un 2021 en el que fue nominada a un Premio Goya y donde, además, protagonizó la última película de Alejandro González Iñárritu, la actriz llegó este viernes al porteño Teatro Tabarís con “Pura Sangre, el amor es un monstruo”, una creación colectiva cruzada por el humor, la música y el baile donde la actriz encarna a “un personaje totalmente arrasado por los mandatos”.

Es el último paso de una actriz que ha regresado al teatro con “Sugar”, después de mucha presencia en el aire televisiva, y que además explora cada vez más profundamente la pantalla grande mientras busca proyectos que la desafíen, como la serie “Morir de amor”, incómoda y extraña ficción con dirección de Anahí Berneri que Siciliani estrenó hace tres años.

Desde entonces ha bajado el perfil: se bajó de “Sugar” y decidió concentrarse en trabajar en cine, algo pendiente en la carrera de la estrella de ”Educando a Nina”. Mal no le fue con el cambio de ritmo: alejada de las tiras locales, entre 2019 y 2021 Siciliani consiguió filmar con Cesc Gay y Alejandro González Iñárritu. Con el español rodó “Sentimental”, donde comparte protagónico con Belén Cuesta, Javier Cámara y Alberto San Juan para asumir una comedia dramática que relata la historia de la pareja de Julio (Cámara) y Ana (Siciliani) que hace más de 15 años están juntos y hacen del combate diario la esencia de su relación. La película, que tiene en total seis nominaciones a los Goya, relata la noche en que Ana invitó a casa a sus vecinos del piso de arriba, una pareja más joven que ellos, amable y simpática, pero cuyos “ruidos” y gemidos mientras tienen sexo, se han convertido en una molestia para Julio y Ana. Y le valió a Siciliani una nominación al Goya como revelación.

Con González Iñárritu, en tanto, protagonizó junto al mexicano Daniel Giménez Cacho “Bardo (o Falsa Crónica de unas Cuantas Verdades)”, próximo filme del laureado cineasta azteca que todavía no se ha estrenado, pero que se define como “una crónica de incertidumbres donde el protagonista, un reconocido periodista y documentalista mexicano, regresa a su país enfrentando su identidad, sus afectos familiares, la absurdidad de sus memorias, así como el pasado y nueva realidad”.

El guión de “Bardo…” volvió a reunir a González Iñárritu con el escritor y guionista argentino Nicolás Giacobone para construir lo que también se describió como “una comedia nostálgica en el marco de un viaje épico”.

SOBRE TABLAS

Con esos antecedentes, la intérprete regresa ahora al país y a las tablas para protagonizar “Pura Sangre”, una historia donde su criatura “no sabe quién es ni qué desea pero está bombardeada por voces externas que quiere satisfacer pero no puede porque dentro suyo busca otras cosas que estar en pareja, casarse o tener hijos”.

En este proyecto, “una obra que habla del amor en estos tiempos”, la actriz de “Sugar” además fue el nexo de este monstruo creativo de tres cabezas conformado por su coequiper en “Estás que te pelas” y “Sputza!”, Carlos Casella, y por su compañera en la tira de Telefe “Educando a Nina”, Jorgelina Aruzzi.

Protagonizada por Siciliani, escrita por Aruzzi, dirigida por Casella y Aruzzi, con coreografías de Casella, aunque en los hechos los roles se entremezclaron, “Pura Sangre” comenzó a gestarse con improvisaciones en el living de Siciliani, la obra mostrará a una mujer reflexionando sobre el amor “atravesado por un sistema de doma que nos somete a una carrera en busca de completarnos”.

“Para que todo ese sufrimiento sea gracioso teníamos que exagerarlo y poner la lupa, porque todos estuvimos en la cama llorando por amor y eso es algo que nos une con los espectadores”, comentaron los actores, para quienes la puesta es “una gran catarsis y la epifanía de darse cuenta que lleva un corsé demasiado apretado”.

Griselda en “Sentimental”, película que le valió una nominación al Goya

“Lo primero que nos dimos cuenta es que no íbamos a tener respuestas sino que íbamos a hacer grandes preguntas y grandes exorcismos con lo que nos pasa, enfocados en mi personaje, que lo extremamos mucho porque es un espectáculo de humor, entonces es un personaje totalmente arrasado por el sistema, los mandatos y las voces que le dicen lo que tiene que hacer”, contó Siciliani sobre la obra, agregando que “lo que me interesa mucho del personaje es que atraviesa un pequeño camino. Uno la ve totalmente arrasada por voces externas con las que quiere ser obediente y no le sale porque dentro suyo hay otra cosa. El sistema amatorio dice que tenés que estar en pareja, casarte y tener hijos. Y eso no está mal: está bien para el que lo desea. Por eso hacemos una metáfora con los caballos pura sangre, que tienen que ganar una carrera, ser perfectos, cumplir, y el cimarrón que fue domesticado, se emancipó y ahora va por los campos corriendo y este personaje está viendo qué tipo de yegua es”.