Amanda Bynes también pide que la liberen de la tutela

La actriz californiana Amanda Bynes, famosa por las series “The Amanda Show” y “What I Like About You” y algunas películas de éxito en el cine, sobre todo en el inicio del siglo XXI, solicitó concluir con la tutela de su madre, siguiendo el ejemplo reciente de Britney Spears y con el agregado de haber cumplido 35 años.

Así lo hizo saber la revista People, que añadió a través de su abogado que su clienta “ha mejorado mucho” en su adicción a ciertas sustancias y no ve necesario que la Corte la siga manteniendo bajo supervisión, por lo que ha pedido concluir con la tutela en el Tribunal Superior de Ventura, en California, el pasado miércoles.

Es que su madre Lynn Bynes solicitó ser su tutora en 2013, cuando la actriz incendió la cochera de un vecino y fue conducida a un instituto de salud mental para ser evaluada durante 72 horas. Aquella fue solo uno de los tantos líos en los que se metió Bynes, que como Britney también se rapó el pelo durante una crisis y mostró conductas erráticas en sus redes sociales.

La conducta de la actriz de las películas “Enamorados por accidente” y “Se dice de mí” dejó dudas en los especialistas y en 2014 su madre obtuvo el control legal de sus asuntos financieros y de salud, aunque tras casi nueve años de aquella medida sus padres notan un progreso “significativo” en ella, por lo que están de acuerdo con concluir la supervisión.

El camino

La última vez que se la sometió a una revisión psicológica fue en septiembre de 2021 y la próxima está prevista para 2023, y su abogado defensor informó que a pesar de que se haya citado para el próximo año, su tutela concluirá cuando se considere que sea lo más conveniente para ella.

Bynes se graduó en el 2019 en el Fashion Institute of Design and Merchandising y ha creado su propia marca de perfumes y una línea de ropa, mostrando un progreso notable en su vida y sus proyectos que durante un tiempo estuvieron sumidos en un mar de escándalos y problemas legales a causa de su adicción a las sustancias.

Envalentonada por el caso de Britney Spears, pide ahora libertad, mientras la causa de la estrella pop despierta un debate más grande en Estados Unidos sobre la figura de las curatelas y el poder que se le otorga a terceros sobre ciertos individuos que quedan rehenes de la situación durante muchísimos años, siendo presas a todo tipo de aprovechadores.