Identificaron al jubilado asesinado y arrojado a una zanja sobre la ruta 2

Si bien el caso todavía posee tintes misteriosos, durante la jornada del viernes y la mañana de ayer se conocieron nuevos datos del hombre que fue hallado sin vida a la vera de la ruta 2, a metros del arroyo Abascay.

En principio, como ya informó este medio en su edición anterior, la víctima fatal tenía 92 años y era oriunda del barrio porteño de Balvanera. A primera vista, había sido golpeado, aunque la causa de su muerte no estaba clara.

Llevaba algunos documentos personales, entre ellos una receta médica, y de esa forma lograron identificarlo.

Fuentes oficiales indicaron que el jubilado se llamaba José Antonio García y tenía domicilio en la Ciudad de Buenos Aires. Hasta la noche del viernes, no mucho más se sabía del episodio, aunque la hipótesis más fuerte señalaba que al jubilado lo habían asesinado en otro lugar para luego descartar su cuerpo en el kilómetro 67,2 de la autovía 2.

ASFIXIADO Y ATADO

No obstante, tras las pericias llevadas a cabo por la Policía Científica y de acuerdo con los resultados de la autopsia que le realizaron al cadáver, García habría fallecido “por asfixia unas 24 horas antes” de ser hallado en un descampado, detallaron fuentes de la investigación.

Conforme a la información revelada por los voceros, “el cuerpo de la víctima presentaba golpes en la cara y en el tórax que evidenciaba muchísima saña”. Y, si bien la pesquisa recién está dando sus primeros pasos, el entorno del fallecido podría dar una pista clave.

El cuerpo fue descubierto por una mujer de 54 años que se trasladaba en moto y avistó “un bulto con forma humana” a la vera del camino, escondido debajo de un puente bajo.

Al acercarse no tuvo dudas y llamó a la Policía. Cuando los efectivos arribaron a la escena e inspeccionaron el hallazgo, advirtieron que se trataba de un hombre mayor, sin vida, que había sido envuelto en bolsas de nylon, con una frazada multicolor y una bolsa de arpillera en los pies.