La Mona puso a bailar a una multitud en el Obelisco
Edición Impresa | 30 de Mayo de 2022 | 05:27

Una multitud cantó y bailó al ritmo del cuarteto cordobés en el centro porteño de la mano del máximo referente del género, Carlos “La Mona” Jiménez, que se subió al escenario montado a espaldas de un Obelisco iluminado especialmente para la ocasión a las 18.30 de ayer, para ofrecer un recital gratuito.
El cantante y compositor, de 71 años, lució varios de sus atuendos característicos en la velada, incluyendo su remera transparente sin mangas y su pantalón negro con arabescos amarillos, mientras la temperatura en la Ciudad de Buenos Aires es de menos de 10 grados: al calor del cuarteto, se movió junto a una banda de 13 instrumentistas con vestimentas rojas y negras que lo acompañaron y dos enormes pantallas verticales flanqueando el escenario, para que pudieran verlo desde todos los costados los miles que se acercaron al monumento porteño para verlo actuar, en un recital organizado como homenaje a sus 55 años de carrera.
“Se fue”, “La agujita de oro”, “Laura” y “Me mata” fueron parte del primer tramo de un show que se extendió por unos 90 minutos, entre los que pasaron los grandes éxitos del cuartetero, como
“Beso a Beso”, “Ramito de Violetas”, “El Federal” y “Quién se ha tomado todo el vino”, que hicieron estallar el centro porteño. También pasó por el show su hija, que subió al escenario para cantar con papá Mona. El recital fue inaugurado por la banda cordobesa Laboratorio de Cuarteto Digital.
Antes del recital, que pudo verse en vivo también a través de la plataforma digital Vivamos Cultura, La mona había dicho que “estoy feliz, tengo contento el corazón, salta de alegría. Hace muchos años canté en el Obelisco cuando se despidió Julio Bocca, canté ‘Balada para un Loco’, pero esta vez voy a estar con mi grupo de cuarteto, que somos 13, y vamos a hacer cuarteto. La gente me va a dar tanta alegría que quizás se me escapa un lagrimón. Voy con toda mi energía y felicidad para divertir a la gente”.
QUEJAS
El Gobierno de la Ciudad de Buenos Aires cortó el perímetro conformado por las avenidas Rivadavia y Corrientes, y las calles Pellegrini y San Martín, para la realización del recital, lo cual también despertó las habituales polémicas en el país de la grieta: mientras decenas de miles saltaban en el Obelisco al ritmo del cuarteto, decenas de tuiteros se quejaban en las redes sociales y el virtual hackeo a la movilidad que suponía el evento organizado para el ídolo popular. Los cortes, además, continuarán hoy.
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