Tras las graves acusaciones de Pellegrino buscan descomprimir

El raid mediático del presidente Gabriel Pellegrino en la noche del viernes no pasó desapercibido en el mundo tripero. Dirigentes, opositores políticos y obviamente el plantel profesional se mostraron sorprendidos por las explosivas declaraciones del titular albiazul, quien incluso -es cierto, con un dejo de ironía como “palo” a los jugadores- puso en duda la continuidad de Néstor Gorosito el año próximo.

A nivel político, el tramo final de un año electoral fue el caldo de cultivo ideal para que propios y extraños sacasen conclusiones de los dichos de Pellegrino con matices electorales. Así, mientras sectores opositores se mostraron sorprendidos -aunque otros conocedores del paño esperaban algún tipo de reacción similar- y especularon con el nivel de daño colateral a la lista oficialista, en el propio gobierno del club no fueron pocos quienes vieron las declaraciones como un freno a la intención de un acuerdo macro para una alianza pangimnasista con varios actuales dirigentes a la cabeza de una nueva conducción que incluso integre a referentes de otras potenciales listas.

Lo concreto es que los jugadores dijeron basta menos de tres meses después de un amago de medida de fuerza en la previa del partido contra Patronato de la segunda fecha del campeonato. En aquel momento, con una promesa de pago los jugadores fueron a concentrar al hotel bolso en mano. Esta vez no sucedió, aún cuando a algunos jugadores les depositaron parte de lo adeudado el mismo jueves. “Siento que los jugadores nos perdieron la confianza”, dijo Pellegrino en La Red. Como mínimo, hay falta de comunicación entre las partes. De eso mismo se había hablado el 10 de junio cuando la sangre no llegó al río pero Gorosito no quiso hablar tras la victoria sobre Patronato.

Mientras los hinchas tomaron partido (especialmente en las redes sociales) por la dirigencia o los jugadores, es evidente que al plantel no le cayeron bien las declaraciones del mandamás, en su gran mayoría personalizadas en la figura del capitán Brahian Alemán, a quien le reprochó haberle hecho “un favor” cuando lo repatrió desde Al Ettifaq, el club árabe al que Gimnasia lo había vendido un año antes y al que aún le adeuda dinero de la recompra.

A partir del ingreso de un pago de Atlético Mineiro a River Plate por el pase de Ignacio Fernández del que al Lobo le corresponde el 25%, en calle 4 dispondrán de dinero para saldar la deuda. El mismo pasa antes por Futbolistas Argentinos Agremiados, de ahí la dilación. El feriado del viernes sonó a excusa, más cuando el propio Pellegrino avisó que la canilla está cerrada y que ya no pondrá dinero.

Anoche, tanto los jardines del Bosque como el ingreso a la platea Basile fueron escenario de charlas y debates entre quienes esperaban otro gesto de los jugadores y aquellos que entendieron como inoportunas las declaraciones de Pellegrino en la previa de un partido clave.