El Lobo juega una final contra el Bicho, como aquella que ganó con los penales de Dopazo

Gimnasia se juega mucho el jueves en el Bosque. Si bien el compromiso ante Argentinos Juniors tiene la misma característica de final que los restantes cinco encuentros, la localía obliga al Tripero, que debe evitar quedarse sin margen de error para alcanzar los puntos que lo mantengan en la máxima categoría para 2024.

Es por eso que los encuentros que se disputarán en el Juan Carmelo Zerillo revisten una importancia mayor, porque los puntos que no se consiguen en casa luego deberá recuperarlos de visitante, con las dificultades que ha tenido este equipo para sumar fuer a de la Avenida 32. De hecho, solamente ganó dos partidos como visitante, ante Argentinos Juniors y Arsenal, este último al que deberá visitar nuevamente en el Viaducto.

Los partidos contra Argentinos Juniors (el jueves a las 16.00) , River Plate (el domingo 29, a las 18.30) y Atlético Tucumán cobran entonces una gran importancia, porque serán juegos en los que hay muchísimo en juego. Casi, la permanencia en Primera para el Lobo.

No hay grandes choques entre Gimnasia y Argentinos Juniors a los largo de la historia. Sin embargo, hay un antecedente de un partido clave en el Bosque que quedó en la memoria de todos los triperos.

El 11 de julio de 1995, por la decimoséptima fecha del Torneo Clausura, Gimnasia recibió en el Bosque Argentinos Juniors. El Lobo de Timoteo había tomado la punta del campeonato y recibía al último de la tabla.

Esa tarde, Gimnasia formó con Leo Noce; Jorge San Esteban, Pablo Morant, Darío Ortíz y Sergio Dopazo; Guillermo Sanguinetti, Lucio Alonso, José María Bianco, Favio Fernández; Guillermo Barros Schelotto y Federico Lagorio.

Por su parte Argentinos Juniors, dirigido por José Omar Pastoriza, tenía un equipo muy joven. El Bicho formó en el Zerillo con Damián Maltagliatti; Diego Germano, Sebastián Pena, Juan Gómez, Leonardo Asencio; Damián Facciutto, Sergio López, Leonel Gancedo, Cristian Zermatten; el paraguayo Carlos Torres y Christian Trapasso.

Sorprendió la visita, cuando a los 42 minutos un buscapié desde la derecha encontró la entrada por la izquierda de Christian Zermatten que sacó un zurdazo casi sin ángulo que Noce no alcanzó a rechazar sobre el primer caño.

En el segundo tiempo, el Lobo lo buscó con todo. Guillermo casi mete un centro desde la derecha que se cerró y Maltagliatti sacó al córner. Otra vez lo tuvo Guillermo con un remate desviado y en una contra el Indio Ortíz ganó solito contra dos delanteros de Argentinos. Timoteo desde el banco hizo lo suyo, con los ingresos de Mario Saccone, un extremo veloz, en lugar de Coco San Esteban y del entonces delantero Andrés Guglielminpietro por el Chaucha Bianco. Las cartas estaban jugadas, porque en el Bicho el defensor Ariel Cuffaro Russo había entrado en lugar del sobrino de Maradona, Sergio López y el Pininito Mas por Trapasso.

Faltaban menos de 10 minutos cuando un pelotazo largo al área buscó a Morant, lo sujetó un defensor y aunque la pelota siguió en juego, el árbitro Luis Olivetto cobró penal, que a los 36 minutos el Cabezón Dopazo cambió por gol para el 1 a 1.

El partido pasó a jugarse en el área de Argentinos. Lo tuvo Morant de cabeza, Saccone probó desde lejos, el cordobés Alonso pegó un tiro en el palo pero el Tripero no podía. Sin embargo, a los 42, cayó un hombre en el área y Claudio Rossi, el asistente número 2, advirtió el golpe sin pelota de Diego Germano a Federico Lagorio. Roja para el 4 de Argentinos y penal, con una protesta interminable de los visitantes. Cuando todo se calmó, el derechazo fuerte y al medio de Dopazo puso el 2 a 1. Y sobre la hora hubo tiempo para otro grito del Cabezón de penal , cuando Cuffaro Russo lo cortó con foul a Guillermo Barros Schelotto.

El 3 a 1 final desató la locura en el Bosque. Gimnasia seguía siendo líder del torneo en la previa de la impresionante movilización a Caballito. Hoy, en circunstancias muy diferentes, este Gimnasia de Madelón necesita sí o sí que los tres puntos queden en casa para que los números cierren y no sufrir con el descenso hasta el último instante de la temporada.

Gracias a los tres penales convertidos por Sergio Dopazo, el Lobo fue a Ferro como puntero