Sin gas ni teléfono por el flagelo de la venta ilegal de metales

El daño a instalaciones de empresas de servicios, valiosas en su contenido por las piezas de cobre y bronce que casi todas poseen, no tiene freno en la Región. Ahora robaron el metal de medidores de gas en un barrio de Villa Elvira y de tendidos del servicio de telefonía fija en Tolosa, y el resultado inmediato del ilícito es la falta de prestación de las redes atacadas.

Lo que ocurrió en el barrio “19 de Febrero” de Villa Elvira fue todo un raid de la delincuencia que se dedica a violentar equipos de infraestructura urbana, en este caso medidores de la prestataria Camuzzi. Dos jóvenes, y a la luz del día, desarmaron 40 gabinetes domiciliarios y dejaron así al mismo número de familias sin gas en una época del año en que dicho suministro es fundamental para hacerle frente a las bajas temperaturas.

Uno tras otro fueron los ladrones desactivando los medidores en el barrio de Villa Elvira que abarca un radio comprendido por las calles 116, 122, diagonal 620 y 90. En este caso, que se trató de los equipos de conexión domiciliaria del fluido, se puso en alto riesgo todo un barrio, pues, se sabe que cuando manos inexpertas manipulan servicios como el del suministro de gas se producen pérdidas que pueden causar una explosión. De ahí que al suceder estos hechos la distribuidora recomienda la comunicación inmediata con los números de emergencia.

“Podrían haber provocado un incendio o una explosión y haber volado la manzana entera”, indicó entre indignado y preocupado uno de los vecinos afectados por el desarme de los medidores.

EN PRIMERA PERSONA

Así se enteró una vecina del ataque a los medidores: ”Ayer por anteayer-, a eso de las 9 de la mañana, estaba desayunando y de repente la estufa se apagó. Agarré el celular y comenté lo que me pasaba en el grupo de WhatsApp del barrio. Al instante contabilizamos entre los vecinos alrededor de 20 casas afectadas, sin gas”, contó una de las vecinas afectadas por los robos.

Tras ese primer contacto entre vecinos, en cada hogar corrieron a ver qué había ocurrido con su medidor. A todos los gabinetes les faltaba un pequeño tubo de cobre, que es la pieza que “cotiza” en el mercado de los metales.

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”Ocurrió todo a plena luz del día, a la mañana, y en pleno feriado. No es la primera vez que pasa, pero sí es la primera vez que ocurre en tantas casas al mismo tiempo. Sale 7.500 pesos cada cañito, sin contar la mano de obra. Y hay vecinos a los que les falta el medidor completo. En esos van atener que gastar bastante más dinero”, planteó otra vecina.

SIN TELÉFONO

Este último fin de semana extra largo otro barrio se vio afectado por el robo de materiales “preciosos” como los metales que componen la estructura de algunas prestaciones hogareñas.

En la cuadra de la calle 520 bis entre 8 y 9 distintas familias expresaron ayer su preocupación a este diario por la falta de servicio telefónico que originó el hurto de largos metros de cable de la vía pública, pertenecientes (por lo que advirtieron de inmediato los usuarios) al sistema de telefonía de la empresa Movistar Hogar.

”La mayoría somos personas grandes, con un servicio que tenemos desde hace treinta años, y sabemos por lo que ha pasado en otros barrios cuando se roban los cables que después la gente está semanas y semanas sin teléfono. Nosotros dependemos del uso de la línea fija”, aseguró uno de los usuarios de esa cuadra de Tolosa que no cuenta ahora con esa prestación.

Para hacerse de metales como el cobre y el bronce -los de mayor valor en el mercado- quienes roban para el circuito de compra-venta ilegal recurren a cuanta estructura urbana que contenga esos elementos.