Encontraron sola y "ensangrentada" a la mujer que estaba desaparecida: qué pasó con ella estos siete días

Tras siete días de incertidumbre y temor, esta mañana apareció Verónica, la mujer de 46 años que era intensamente buscada en La Plata. La vecina, que reside en Gorina, había sido vista por última vez el pasado domingo cuando fue subida a un vehículo color blanco en la esquina de su casa. Hoy fue encontrada debajo de las vías del Tren Universitario, en las inmediaciones de las calles 115 y 46.

Desde el domingo pasado a la mañana que no tenían rastros de ella, por lo que crecía la desesperación y la angustia. Sobre todo porque recibe medicación producto de las convulsiones que sufre y una discapacidad, la pista más fuerte era que había sido secuestrada.

Según se supo, la Justicia estuvo tras los pasos del conductor de un auto al que se subió Verónica en 138 y 485 -que sería un remisero de Melchor Romero-, tal como se pudo observar en cámaras de seguridad. Una vez identificado el presunto captor y sabiendo su domicilio, hasta allí llegó la policía, pero no encontraron nada, ni a él ni a la mujer.

Lo cierto es que este domingo la Justicia confirmó que Verónica fue ubicada en La Plata. En tanto no estaba con ella el hombre acusado de haberla subido al auto, por lo que está considerado como prófugo.

Según se pudo conocer, Verónica fue encontrada cuando se permanecía recostada en un habitáculo ubicado debajo de las vías del Tren Universitario, cerca de la Facultad de Arquitectura. Según informó el parte policial, estaba en una zona donde conviven personas en situación de calle. 

A su vez, confirmaron que “se encontraba ensangrentada, desconociendo si fue víctima de algún ataque o abuso”. Mientras es asistida por profesionales de la salud, se encuentra estable y fuera de peligro. 

Cabe destacar que desde que desapareció Mogollón se realizó una campaña de búsqueda para dar con ella cuantos antes. Es por eso que se brindaban datos de cómo estaba vestida la última vez que la habían visto: tenía una campera oscura con la inscripción "seguridad" en la espalda, pantalón bordó y de color rosa tanto zapatillas como la prenda que llevaba debajo del abrigo.

En medio de la desesperación, familiares y vecinos realizaron protestas en el barrio y en las fiscalías en donde pidieron por su aparición sana y salva. "Que la devuelvan, queremos a Vero", se leía en las pancartas que se exhibieron durante el reclamo realizado en Gorina, que días después trasladaron al edificio de 8 y 58.