La cocina como puente

Inclusión a través de los sabores. En el nuevo ciclo de la señal elGourmet, la chef y conductora encabeza un programa en el que la gastronomía se convierte en herramienta de encuentro y de oportunidades laborales para personas con discapacidad. Con testimonios y recetas, una propuesta necesaria

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Por CECILIA FAMA

La gastronomía une culturas, cruza fronteras, transforma realidades. Y el nuevo programa de elGourmet, Unidos por la cocina, lo demuestra con claridad. Con la conducción de Felicitas Pizarro, este ciclo propone un enfoque simple pero poderoso y movilizador: personas con discapacidades que comparten su pasión por la gastronomía. A través de recetas y testimonios con experiencias de vida, el programa, que se emite cada viernes del mes a las 18 -con repetición los domingos a las 18,30- mo invita a conocer historias, proyectos, desafíos y logros.

“En el programa se refleja que la gastronomía es un puente para la inclusión, para la comunidad y para crear vínculos. Es algo que muchas veces damos por sentado: compartir en familia o con amigos alrededor de una mesa. Lo que más me sorprendió de cocinar con personas con una discapacidad es que están llenos de capacidades y tienen, tal vez, una discapacidad que está a la vista. Pero, ¿cuántos de nosotros tenemos alguna discapacidad que no se ve? En cocina somos todos muy capaces”, sostiene Pizarro en diálogo exclusivo con el Gourmet.

La consigna es clara: visibilizar la importancia de la inclusión activa. Café Positivo, Fundación Nosotros y Taller San Francisco de Asís son algunas de las organizaciones que Felicitas visita para cocinar junto a jóvenes profesionales que trabajan allí. Cada espacio tiene su especialidad —desde pastas y panadería hasta viandas, wraps y tartas—, pero todos comparten el mismo objetivo: confiar en el talento y abrir una puerta real al mundo laboral.

En Argentina, el mercado laboral es cuanto menos desafiante, si no reacio, a la incorporación de personas con discapacidad. La Organización Internacional del Trabajo (OIT) señala que, de acuerdo con datos del INDEC de 2018, en el país viven más de 5 millones de personas con alguna discapacidad, y apenas una de cada diez en edad laboral accede a un empleo.

Incluso, entre quienes poseen el Certificado Único de Discapacidad, solo un 9% cuenta con un empleo registrado. Según la OIT, esta baja participación se debe en gran parte a barreras culturales y actitudinales basadas en prejuicios y desconocimiento.

 

La consigna es clara: visibilizar la importancia de la inclusión activa

 

En ese marco, Pizarro no duda: “Estoy convencida de que la gastronomía puede convertirse en un camino real para generar más oportunidades laborales y derribar prejuicios. En el programa se ve justamente eso: que la cocina une mucho y que es un oficio muy lindo de aprender. Es una profesión muy dinámica, didáctica y artesanal. Todo esto ayuda a construir puentes y a incluir a personas con discapacidad en el mundo laboral formal”.

El detrás de cámaras también tuvo un cuidado especial. Todo el equipo de elGourmet trabajó con una psicopedagoga para que en cada instancia de producción primaran el respeto y la coherencia. Se prestó atención al lenguaje y al entorno de trabajo, con recomendaciones específicas sobre cómo acompañar a cada participante según sus necesidades, garantizando así una experiencia cuidada durante las grabaciones.

A diferencia de otros programas que condujo, esta vez Felicitas asumió un rol distinto: “Bueno, en comparación con otros ciclos que conduje, en este caso justamente es conducirlo y no cocinar. Mi rol consta de acompañar y dejar el protagonismo para ellos, para los verdaderos cocineros de este programa, que son todos los jóvenes profesionales que se ven en cada capítulo”.

La experiencia, asegura, fue reveladora: “Los aprendizajes fueron muchísimos. Pude derribar varios prejuicios, como ese que te contaba: una persona puede tener una discapacidad, pero a su vez miles de capacidades más. A veces no son visibles, pero lo cierto es que una discapacidad no define a nadie. Al contrario, lo que realmente resalta son las infinitas habilidades tanto para cocinar como para ser amables, atentos, empáticos, alegres… y eso es lo que termina brillando”.

Además de esas cualidades, la cocinera subraya la paciencia y la dedicación de quienes sostienen estos proyectos: “Aprendí mucho sobre la paciencia, y también sobre la admiración hacia quienes coordinan y sostienen estos equipos de trabajo. Entendí el enorme valor que aporta la construcción de vínculos, y el cambio que logran en los espacios de trabajo, en la comunidad y todo lo que se genera a través de la colaboración. Al final, lo que realmente dignifica es poder trabajar. Así que sí, con este nuevo programa de elGourmet me llevé muchísimo aprendizaje a casa y lo agradezco un montón”.

La recepción del público también la entusiasma: “El público lo recibió muy bien, llegó en un momento especial a nuestro país en que la gente está dispuesta a hablar de esto. Está dispuesta a emocionarse, a ver el programa, a querer aprender, a entender qué se dice, cómo se dice, qué no se dice, y entendiendo la importancia de la inclusión, que es lo mejor. Así que yo creo que el programa es un éxito por todo eso”.

 

En el país viven más de 5 millones de personas con alguna discapacidad

 

El título Unidos por la cocina no es casual: la pasión por la gastronomía es el punto en común, pero no lo único. En el programa se muestra también cómo los participantes atienden al público, toman pedidos y gestionan tareas, tal como sucede en cualquier restaurante o emprendimiento gastronómico.

La chispa inicial de este camino de inclusión puede resumirse en una frase: “’Seño’, yo no quiero jugar más a trabajar. Yo quiero trabajar de verdad”, dijo Jorge, de 42 años, cuando transitaba un espacio de capacitación. Ese deseo se transformó en acción y dio lugar a Peldaños, una organización social que, al igual que tantas otras, potencia a jóvenes adultos con discapacidad para que accedan a un empleo real.

Con esa misma convicción avanza este nuevo ciclo, donde las historias se entrelazan con recetas, saberes y emociones. Porque, como insiste Felicitas, “en cocina somos todos muy capaces”. Unidos por la cocina se puede ver todos los viernes a las 18, con repeticiones los domingos a las 18,30. Siempre por las pantallas de elGourmet.

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