Gimnasia sigue acorralado por las deudas con viejas transferencias

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No solamente las deudas con empleados, plantel y proveedores son un problema para el Tripero en los últimos tiempos. Gimnasia ya se encuentra inhibido para incorporar futbolistas en los próximos tres mercados de pases si no levanta la deuda de 100 mil dólares que reclama Defensor Sporting por Matías Abaldo -a la que habrá que sumarle la segunda cuota de U$S 120 mil vencida en los últimos días- pero además debe dinero a los clubes de origen de Alan Lescano e Ignacio Miramón.

Por Lescano, el futbolista formado en Empleados de Comercio y Balompié (ambos de Bolívar) Gimnasia adeuda la última cuota de 40 mil dólares que venció en febrero pasado. En cambio, los importes por la participación de Balompié en el pase de Miramón (actualmente en Boca) son muchos más importantes, ya que en agosto venció una cuota de 200 mil euros y en noviembre tiene fecha de vencimiento otra de 150 mil euros.

Si bien hay diálogo entre las partes, Balompié ya realizó la consulta pertinente con su abogado especializado en Derecho Deportivo, Manuel Usandizaga, hijo del exintendente rosarino y expresidente de Rosario Central, Horacio Usandizaga.

Al margen de la situación compleja para la tesorería albiazul, la deuda puede enturbiar la relación de Gimnasia con Balompié, que por intermedio de Antonio Piergüidi (que jugó en Gimnasia en los ‘2000) acercó muchos jugadores al Lobo, tales los casos de Lescano, Miramón, Manuel Panaro, Bautista Panaro, Tomás Klemenco y Salvador Fúster, quien ya ha tenido participación en la Selección juvenil Sub 16.

 

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