Frialdad con Villarruel y dardos hacia la oposición

Edición Impresa

Durante la hora y quince minutos que duró su discurso, el presidente de la Nación, Javier Milei, mantuvo un gesto adusto en la lectura del discurso. Sin embargo, lanzó algunas chicanas contra la oposición e interrumpió a la vicepresidenta, Victoria Villarruel, cuando esta, en su calidad de titular de la Asamblea Legislativa, dio por finalizada la jornada.

La tensión entre ambos volvió a quedar en evidencia anoche, con un frío saludo de bienvenida que no fue enfocado por la transmisión oficial cuando el Presidente arribó al Congreso.

Además, en las fotos oficiales, hay una sola que registró un diálogo al pasar entre Villarruel (parada en el estrado) y Milei, frente al atril donde leyó su exposición.

Y cuando la Vicepresidenta dio por finalizada la Asamblea, al creer que el Presidente había concluido su alocución, el libertario le llamó la atención. Acto seguido, el economista improvisó unas palabras para alentar a su militancia para finalizar su exposición con su clásica frase: “Viva la libertad, carajo”.

El primer mandatario también tuvo palabras muy duras con la oposición. Especialmente contra el diputado radical Facundo Manes (ver página 7) y contra el peronismo.

“Desde abril que la economía no para de crecer y que ustedes, keynesianos, no paran de llorar, “Aunque les duela al Frente para la Victoria, o a Unión por la plata [SIC], como se llamen ahora”, dijo.

Una Corte incompleta

A horas de haber asumido en la Corte Suprema, Manuel García-Mansilla estuvo anoche en la inauguración del período ordinario en el Congreso para presenciar el discurso del presidente Javier Milei, quien lo había candidateado un año atrás para integrar el máximo tribunal.

El abogado se sentó en primera fila, junto a Carlos Rosenkrantz, Ricardo Lorenzetti y Horacio Rosatti, pegado al palco de los ministros. En ese cuarto de hora recibió el saludo de diputados y senadores, gobernadores y funcionarios del Gobierno.

La ausencia notoria fue la del juez federal Ariel Lijo.

 

 

 

Villarruel

Las noticias locales nunca fueron tan importantes
SUSCRIBITE