Operativo Brasil: se perfila un once similar

Argentina sabe que está virtualmente clasificada al Mundial 2026, pero que necesita conseguir un solo punto a falta de cinco jornadas para el final de las Eliminatorias (también le sirve que Bolivia no le gane a Uruguay). El próximo escollo será el clásico ante Brasil, este martes a las 21 en el Monumental. Sin dudas, uno de los encuentros que más le gusta jugar a la Scaloneta.

Más allá de haberse quedado con un triunfo de oro ante Uruguay, que lo dejó más líder que nunca en la clasificación, el equipo recuperó características de su ADN: agresividad e intensidad, algo que no mostró en los últimos encuentros. Más allá de que tuvo un irregular primer tiempo, en el complemento tuvo otra cara y se quedó con una victoria justa ante la Celeste.

Y pensando en Brasil, la idea principal que ronda por la cabeza de Lionel Scaloni es no tocar demasiado el equipo. En principio, solo apostaría por el ingreso de Rodrigo De Paul.

El mediocampista del Atlético Madrid jugó ayer el amistoso solidario ante la Sub 20 y se mostró bien desde lo físico. Scaloni sabe que puede llegar a aportar experiencia y despliegue en un partido de semejante envergadura, como será el del martes.

El que dejaría el equipo es Giuliano Simeone, quien cumplió ante Uruguay. El jugador del Atlético Madrid hizo mucho desgaste y se mostró como una buena opción por la banda, más allá de no estar fino en las terminación de las jugadas.

El entrenador sabe que Simeone es una buena opción para el desequilibrio y la velocidad como recambio, sabiendo que no contará con el expulsado Nicolás González.

El que se ganó un lugar para el clásico es Thiago Almada. Sin dudas, fue el punto más alto de la Albiceleste en Montevideo, siendo imparable en el segundo tiempo y dándole la victoria a la Selección con un golazo. Mostró frescura en el ataque como mediapunta y también hizo un buen trabajo sucio en el primer tiempo, abocado más a lo defensivo.

Es el futbolista que más sorprendió a Scaloni en esta convocatoria, más allá que trabajó muchos años con la Albiceleste y hasta se dio el lujo de ser parte del plantel campeón del mundo. El DT vio un jugador más maduro y con mejores determinaciones, dejando en claro que el salto a Europa le dio otra jerarquía. Ante la ausencia de Messi y Dybala, Almada cumplió con creces la responsabilidad de ser uno de los conductores del equipo. Y ante Brasil, puede aportarle mucho al equipo.

Por lo pronto, el plantel va a entrenar hoy por la tarde en Ezeiza, en su anteúltima práctica antes del clásico. Más allá que Brasil no tuvo un gran rendimiento en el último tiempo, tiene mucha jerarquía en ofensiva, donde cuenta con jugadores como Vinicius Junior, Raphinha y Rodrygo.

Scaloni y compañía saben que será clave la intensidad, ya que Brasil no es un equipo que tenga la iniciativa. Apuesta más al orden defensivo y a generar ataques directos con sus individualidades.

Argentina tiene jugadores para quedarse con los tres puntos y asegurarse la clasificación a falta de cuatro fechas en las Eliminatorias. El objetivo está cerca y en caso de lograrlo ante Brasil, sería la frutilla del postre.