La famosa Columna 88
Uno de los mejores lugares de Punta Lara para pescar
| 7 de Agosto de 2008 | 00:00
Con el fin de realizar un relevamiento para Pesca al Día, con los amigos Martín "Vasco" Tamborenea, Pablo San Leandro y Julio A. Pérez, nos pusimos de acuerdo en reunirnos a las 7 del día siguiente y partir hacia algún lugar cercano.
Mientras tomábamos el desayuno que consistió en unos mates acompañados con unas muy ricas facturas, decidimos ir hasta Punta Lara, más precisamente a la Columna 88, frente al inicio de la Reserva de la Selva Marginal.
El día estaba amaneciendo muy nuboso y frío, con viento del Este a una velocidad de 15 kilómetros a la hora y que fue rotando posteriormente hacia el Sudeste, habiendo lloviznado tenuemente unos minutos antes de encontrarnos. El río habría de crecer hasta el mediodía.
De carnada disponíamos de algunas mojarras y cornalitos salados y filetes de dentudo, así es que paramos, para adquirir una porción de mojarras vivas, en la rotonda de la Diagonal 74 y 120 siguiendo viaje enseguida.
Llegamos al lugar antes de las 8 y ya había muchos pescadores con las líneas en el agua. Nos costó encontrar un lugar, pero la buena disposición de todos los que allí se encontraban, sumado a la camaradería que reinó en todo momento hizo que rápidamente nosotros también estuviéramos pescando.
Además, cuando nos reconocieron, nos ayudaron gustosos con los pejerreyes que obtenían posando para las fotos y gritando "cámara, cámara" cada vez que alguien izaba un pescado, para que fuéramos a fotografiarlo.
Todos realizaron pesca de fondo que es como hoy se están logrando las capturas de costa. Las líneas de una o dos brazoladas no inferiores a 60 ó 70 cm de longitud y anzuelos Mustad o similares números 1 ó 2, encarnados con lo que anteriormente comentáramos ya sea en forma individual o con el consabido "sanguchito", cañas de lance de 3,50 metros, y reeles tanto frontales como rotativos, según gusto y elección de cada uno.
Fue transcurriendo el tiempo y los pescadores iban logrando su "cosecha", indudablemente los más avezados y los que depositan las líneas más lejos fueron los que hicieron la diferencia, así que insistimos en sugerir que para ganar algunos metros más, los reeles, para este tipo de pesca, estén cargados con nylon fino. Los nuestros eran entre el 0.26 y 0.30 al que se le agrega al final un chicote del 0.60 para que aguante la tensión del lanzamiento.
Los ejemplares que se pescaron fueron en su gran mayoría de entre 25 y 33 cm con algunos pocos fuera de medida y unos cuantos que se acercaron a los 40 centímetros.
Tras pescar toda la mañana y pasado el mediodía decidimos que ya era suficiente dado que habíamos logrado algo más de 40 muy buenos flechas de plata, entonces nos dispusimos a desarmar los equipos, acomodar todos los elementos en los bolsos y volver hacia nuestra ciudad.
Con camaradas de pesca como los que siempre me acompañan se hace mucho más fácil realizar estos relevamientos porque son excelentes pescadores y mejores amigos, pero en este caso en particular debemos agradecer también a Carlos Ronchi y a toda la barra de la famosa Columna 88 ya que nos prestaron toda su colaboración y nos hicieron pasar una mañana inigualable.
Mientras tomábamos el desayuno que consistió en unos mates acompañados con unas muy ricas facturas, decidimos ir hasta Punta Lara, más precisamente a la Columna 88, frente al inicio de la Reserva de la Selva Marginal.
El día estaba amaneciendo muy nuboso y frío, con viento del Este a una velocidad de 15 kilómetros a la hora y que fue rotando posteriormente hacia el Sudeste, habiendo lloviznado tenuemente unos minutos antes de encontrarnos. El río habría de crecer hasta el mediodía.
De carnada disponíamos de algunas mojarras y cornalitos salados y filetes de dentudo, así es que paramos, para adquirir una porción de mojarras vivas, en la rotonda de la Diagonal 74 y 120 siguiendo viaje enseguida.
Llegamos al lugar antes de las 8 y ya había muchos pescadores con las líneas en el agua. Nos costó encontrar un lugar, pero la buena disposición de todos los que allí se encontraban, sumado a la camaradería que reinó en todo momento hizo que rápidamente nosotros también estuviéramos pescando.
Además, cuando nos reconocieron, nos ayudaron gustosos con los pejerreyes que obtenían posando para las fotos y gritando "cámara, cámara" cada vez que alguien izaba un pescado, para que fuéramos a fotografiarlo.
Todos realizaron pesca de fondo que es como hoy se están logrando las capturas de costa. Las líneas de una o dos brazoladas no inferiores a 60 ó 70 cm de longitud y anzuelos Mustad o similares números 1 ó 2, encarnados con lo que anteriormente comentáramos ya sea en forma individual o con el consabido "sanguchito", cañas de lance de 3,50 metros, y reeles tanto frontales como rotativos, según gusto y elección de cada uno.
Fue transcurriendo el tiempo y los pescadores iban logrando su "cosecha", indudablemente los más avezados y los que depositan las líneas más lejos fueron los que hicieron la diferencia, así que insistimos en sugerir que para ganar algunos metros más, los reeles, para este tipo de pesca, estén cargados con nylon fino. Los nuestros eran entre el 0.26 y 0.30 al que se le agrega al final un chicote del 0.60 para que aguante la tensión del lanzamiento.
Los ejemplares que se pescaron fueron en su gran mayoría de entre 25 y 33 cm con algunos pocos fuera de medida y unos cuantos que se acercaron a los 40 centímetros.
Tras pescar toda la mañana y pasado el mediodía decidimos que ya era suficiente dado que habíamos logrado algo más de 40 muy buenos flechas de plata, entonces nos dispusimos a desarmar los equipos, acomodar todos los elementos en los bolsos y volver hacia nuestra ciudad.
Con camaradas de pesca como los que siempre me acompañan se hace mucho más fácil realizar estos relevamientos porque son excelentes pescadores y mejores amigos, pero en este caso en particular debemos agradecer también a Carlos Ronchi y a toda la barra de la famosa Columna 88 ya que nos prestaron toda su colaboración y nos hicieron pasar una mañana inigualable.
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