“A mi no me grita nadie”, dijo un peón y mató a su patrón de un escopetazo

EL CASO CONMOCIONÓ EN LA ZONA DE CHÁVES

Hacía medio siglo que nadie se atrevía a levantarle la voz. “El único que me ha gritado ha sido mi padre y se murió hace 50 años. Yo soy una persona mayor y a mí no me grita nadie. Le voy a pegar un tiro ”, le escuchó decir un transportista a un empleado que, poco después de una discusión, mató de un disparo de escopeta a un consignatario de hacienda en un campo del partido bonaerense de Adolfo Gonzales Chaves, en el sudeste provincial.

El drama se desató en el establecimiento rural “El Micheo”, donde la víctima, Marcos Pizarro Costa Paz, de 38 años, oriundo de la Capital Federal fue asesinada presuntamente después de que le gritó a un empleado.

La esposa de Pizarro estaba a punto de dar a luz y se encontraba en el lugar para retirar el ganado ya que al día siguiente se le vencía el contrato de arrendamiento.

El hecho ocurrió el miércoles en el establecimiento rural ubicado a unos 15 kilómetros de la localidad de Juan E. Barra, en el partido de Gonzáles Cháves.

Se produjo una discusión entre Pizarro Costa y el empleado Bonifacio Martínez, de 72 años, quien luego caminó unos 50 metros hasta su casa, tomó una escopeta y volvió para dispararle, causándole la muerte.

“A mí no me vas a gritar, yo podría ser tu padre”, le dijo Martínez antes de tirar. La víctima se habría dirigido en forma “despectiva” a Martínez antes de producirse el trágico desenlace. Pizarro Costa había arrendado el campo durante tres años, pero como se le vencía el contrato había ido con varios camiones para retirar la hacienda. En tanto, el empleado llevaba unos 30 años trabajando en el lugar y vivía allí con su mujer.