Movida vecinal para ayudar al club El Ombú

La comunidad de City Bell se moviliza por El Ombú, un club de fútbol infantil con más de cinco décadas de actuación en la zona al que se le reclama uno de los terrenos que ocupa, en la calle Cantilo entre 27 y 28. A los dirigentes de la entidad los sorprendió una cédula de notificación expedida por la Justicia en la que se les exige desalambrar la parcela, que es, justamente, en la que se ubica la cancha donde un centenar de chicos realizan las prácticas y disputan los partidos.

Para evitar el desalojo de esas tierras, semanas atrás se llevó a cabo un abrazo simbólico en la sede de la entidad y la convocatoria reunió a un gran número de vecinos y de representantes de distintas instituciones de la zona. También se han realizado gestiones ante funcionarios de la Municipalidad y legisladores provinciales.

“Hace 55 años que el club utiliza ese terreno -resaltó el tesorero de El Ombú, Diego Montero-. Además de la función social que se cumple con el fútbol infantil, a lo largo de su historia el club ha sido un importante pilar para la comunidad de la zona. Está muy vinculado a la Escuela 117, el hogar Bethel, el Rotary y otras instituciones vecinas. Es de gran importancia en la zona y necesitamos ese espacio”.

El Ombú se fundó el 15 de septiembre de 1957, a instancias de un grupo de vecinos de City Bell que vieron la necesidad de organizar un centro de fomento para dar lugar en el barrio a actividades deportivas, culturales y sociales. Con los años, y gracias al empeño puesto por sus socios, la institución fue creciendo. Hoy cuenta con instalaciones que incluyen gimnasio, buffet, un sector administrativo y la cancha con su vestuario.

Se desarrollan, amén del fútbol afiliado a la liga APLAFI, otras actividades como danzas folclóricas, costura, apoyo escolar, murga y boxeo. Posee también una biblioteca popular. “Más de una vez ha funcionado como rueda de auxilio del Municipio, convirtiéndose en comedor y ropero comunitario o centro de evacuados en inundaciones”, subrayó el dirigente.

No obstante, la actividad principal es la escuela de fútbol. “Lo es porque nuestra función excluyente -señaló Montero- es la de sacar a los chicos de la calle y del ocio e inculcarles los reales valores de la vida”.

La notificación que puso en alerta al club intima a sus autoridades a retirar del inmueble la viga de hormigón armado sobre la cual se encuentra emplazado el alambrado olímpico. Se trata de una demanda entablada por Mariano Otonne en el Juzgado en lo Civil y Comercial N º 16, a cargo de Enrique Gorostegui.

Según se indicó en la entidad, el demandante sería un ex jugador de El Ombú y para llevar adelante el pleito habría presentado una escritura en la que figuraría como titular del terreno. “Nosotros no tenemos ningún documento, pero lo cierto es que la institución está ahí desde el año ´57 y dan fe de eso los socios fundadores”, explicó Montero.